Aunque para nada se veía sospechoso que los gobernadores de Veracruz y Chihuahua (Javier y César, respectivamente) se crearán normas anticorrupción “a modo”, la Suprema Corte de Justicia resolvió echar abajo sus “blindajes”… así que, una vez que dejen sus changarros, se ve más posible investigar la forma en que administraron los recursos públicos.
Por unanimidad, los ministros de la Corte decidieron dar marcha a tras a las leyes promovidas por los susodichos, luego de que sus correligionarios (del PRI, claro) perdieron las elecciones gubernamentales, en junio pasado. Muy espontáneamente, a los ejecutivos salientes se les ocurrió que, como legado de su administración, estaría chévere que pudieran designar a fiscales, controladores y magistrados del sexenio entrante… así, el nuevo gobernador estaría “algo” limitado para investigar fiscalmente a su antecesor. En imagen, los Duarte son los de los costados; el del centro (Roberto Borge, gobernador de Quintana Roo) sobra… momentáneamente, ya que el máximo tribunal continúa con trámites para declarar inconstitucionales decretos aprobados por “su” Congreso. Es decir, va por el mismo camino de los Duarte.
Nada perdidos esos Duarte: sus blindajes fue la respuesta a las amenazas que los candidatos opositores realizaron durante sus campañas electorales. En el caso de Javier Duarte, el candidato panista (y ahora futuro gober de Veracruz), Miguel Ángel Yunes, tuvo como promesa de campaña meter al tambo al jocoso hombre que hizo del robo de frutsis el crimen más elevado del estado. Quizás, ahora que lo investiguen, se comprobará que en el estado jarocho se roba algo más que golosinas…
Con César la cosa no es muy diferente: el futuro gobernador de Chihuahua, Javier Corral, ya lo tiene en la mira… y con todo y que ha declarado que no saldrá del estado cuando deje la gubernatura y estará abierto a cualquier investigación, el buen Duarte está sudando demasiado por las noches. “Estoy abierto a lo que en el marco de la ley se establece ante una actitud beligerante, porque no se puede detener la marcha del estado y yo tengo una responsabilidad hasta el 3 de octubre”, comentó el gobernador que ayer fue visto en Bellas Artes montando guardia de honor a Juan Gabriel.
En fin, en lo que van pensando cómo zafarse de futuras investigaciones, los Duarte tendrán que acatar la solicitud de la Procuraduría General de la República (PGR), la cual pidió a los gobiernos de Chihuahua y Veracruz ajustar su legislación a los estándares constitucionales en materia anticorrupción.
“Con esta resolución, las normas impugnadas quedarán sin efecto, por lo que los Congresos de estos estados deberán ajustar el marco regulatorio, expedir las leyes y realizar las adecuaciones normativas correspondientes. A efecto de que los sistemas locales anticorrupción cumplan con los estándares constitucionales”.
¿Los Duarte pedirán beca para estudiar en España?, ¿el “nuevo” PRI abandonará a su suerte a estos ejemplares estadistas?, ¿al final todo será parte de nuestra política-ficción? No se pierdan los próximos capítulos de esta nada emocionante, pero algo hilarante, historia que ya mero llega a su fin. Aunque promete continuación.