Como saben, el pasado domingo los Baltimore Ravens se coronaron en el Super Bowl XLVII, celebrado en New Orleans y después de tres años, un equipo de la Conferencia Americana se volvía a proclamar campeón del mundo, perooo no todo parece bueno.
Y es que en el mundo de las finanzas corre una leyenda que cada vez cobra más fuerza. Fíjense que un parámetro de las ganancias o pérdidas de Wall Street es la final de la NFL. La leyenda urbana dice que si un equipo de la Conferencia Nacional gana el Dow Jones se beneficiado, pero cuando una franquicia de la Americana se corona, se vienen los números rojos.
Si los 49ers de San Francisco hubieran alzado el Trofeo Vince Lombardi, Dow Jones hubiera cerrado con ganancias, pero no fue así.
No hay ninguna base científica para este hecho, pero se ha cumplido en más del 80% de las ocasiones. Es más, desde 1967 sólo ha fallado en siete ocasiones: 1970, 1978, 1990, 1998, 1999, 2000 y 2004. ¡Qué tal!
Para que vean que no falla, chequen: el año pasado, los Gigantes de Nueva York derrotaron a los Patriotas de Nueva Inglaterra y el índice industrial de Wall Street aumentó 1.28%. Ayer, Dow Jones cerró con un descenso de 0.93% y perdió la barrera de los 14,000 puntos que había logrado el viernes pasado.
Ahora, para el Super Bowl XLVIII, a celebrarse en Nueva York, concretamente en la casa de los Giants y de los Jets, veremos quién se hace con el título de la NFL y a ver cómo le va a Wall Street.
¿Crisis económica? qué vaaa…