Durante muchísimos años el marfil se convirtió en la moneda clandestina que financió la guerra en África. Miles de elefantes murieron en crueles matanzas que tenían un único objetivo: quitarles los colmillos para vender el marfil por debajo del agua.
De acuerdo con algunos estudios, al menos 30 mil elefantes africanos son masacrados cada año, pero solo entre 2010 y 2012 fueron más o menos 100 mil. Durante los últimos 5 años, el gobierno de Mozambique anunció la pérdida de más del 48% de sus elefantes.
Y la evolución ya está haciendo su trabajo para preservar la especie.
Desde hace algunos años, el Parque Nacional de Gorongosa, ubicado en Mozambique, reporta que están naciendo elefantes hembra sin colmillos, que son herramientas fundamentales para estos animales. Para ser específicos, los trabajadores del parque notaron este fenómeno desde 1992.
¿Por qué los elefantes nacen sin colmillos?
Podrá leerse muy cruel e impresionante pero probablemente sea cuestión de evolución, la vida tratando de adaptarse a las condiciones para que la especie no se extinga.
El 21 de octubre pasado, en la revista Science, un estudio dirigido por investigadores de la Universidad de Princeton, en Estados Unidos, reveló cuáles son los genes que provocaron la evolución de los elefantes sin colmillos como respuesta a la caza furtiva.
La investigación encontró a dos genes asociados con el desarrollo de los dientes en los mamíferos, uno de ellos conectado al cromosoma X. Después de la guerra civil de Mozambique se observó un aumento de elefantes hembras sin colmillos del 18.5 al 50.9%, situación que no se observa en elefantes machos.
Gracias a modelos numéricos simulados y análisis estadísticos, los investigadores encontraron que una elefante hembra sin colmillos tiene 5 veces más chance de sobrevivir durante la guerra, que una con colmillos.
Es decir, en ese contexto, los colmillos se volvieron un lastre y un factor de riesgo, pero en un entorno natural, son órganos que les sirven para defenderse, por ejemplo.
Otro dato interesante. Debido a que los científicos observaron hembras sin colmillos pero no machos, dedujeron que era un rasgo relacionado con el cromosoma X, mismo que puede ser letal para los machos. Es decir, si una hembra queda embarazada de un macho, abortaría de forma espontánea al feto en la mayoría de los casos.
Una encuesta de fenotipo/población encontró que que las madres sin colmillos eran más propensas a tener el 65.7% de descendencia femenina. Pero también las hace menos fértiles.
Pero esto cambió por completo su comportamiento. Encontraron que las hembras sin colmillos consumen dietas distintas a los elefantes con colmillos, lo que a su vez podría alterar el funcionamiento de todo el ecosistema.
Cuando nos preguntemos qué tanto afecta la intervención negativa del ser humano en el medio ambiente, pensemos en esta investigación.