Tras cancelar una conferencia de prensa programada para esta tarde en el auditorio del Museo de Memoria y Tolerancia por exceso de asistencia, la periodista Carmen Aristegui dirigió un mensaje en torno a su salida de MVS, su posición sobre los motivos de su conflicto con la empresa y su estrategia a seguir en el futuro.
La comunicadora anunció su firme exigencia de que se le vuelva a dar el espacio que MVS le cerró recientemente luego de un conflicto con dicha empresa. Mientras sus directivos afirman que su posición se debe al supuesto uso indebido de la marca que el equipo de Primera Emisión de MVS hiciera al anunciar su participación en la plataforma de filtraciones MexicoLeaks, Aristegui y sus colaboradores dicen que “el tema de MéxicoLeaks y la empresa siempre nos ha sonado a pretexto”. “Pedimos el regreso al aire en las mismas condiciones: sin más y sin menos”, dijo.
Durante su mensaje, la periodista denunció que los trabajadores que han salido de MVS en los últimos días, ya sea por despido o por propio deseo, no están recibiendo la oferta de liquidación o de finiquito, según sea el caso, que por ley les corresponde.
“Esta batalla es por el derecho a decir y por el derecho a escuchar”, afirmó.”Es una batalla por nuestra libertad que debe ser de todos porque una batalla como esta en solitario nunca será ganada”.
“A pesar de lo que diga el gobierno, este NO es un conflicto entre particulares y lo saben”, declaró sobre el posicionamiento oficial que el gobierno de la República tomara, a través de la Secretaría de Gobernación. En un comunicado, las autoridades mexicanas calificaron al caso de “conflicto entre particulares” y dijeron estar interesados en que se solucione.
“Esto no es otra cosa que un intento de golpe, y digo intento porque para nosotros no se ha consumado y las preguntas están abiertas […] ¿quién redactó esos comunicado inauditos? [El caso] hace pensar que aquí había alguien realmente enojado, alguien buscando una venganza”.
“Apenas uno o dos días antes de los comunicados estuvimos conversando sin pleito alguno”, cuenta sobre su relación con los directivos de MVS, particularmente Joaquín Vargas, a quienes ha llamado a reunirse con ella el lunes próximo para dar respuesta a su petición de recobrar el espacio “que juntos hemos construido”. “No queremos agotar la vía del diálogo”, afirmó.
Aristegui aseguró que los lineamientos que la empresa deseó imponer para condicionar su regreso no sólo van “en contra del código de ético [sino también] de la ley”.
La periodista lamentó que MVS ignorara las recomendaciones del Ombudsman MVS, “la figura arbitral que habíamos creado previamente por si llegaba el día en que se necesitara su intervención. Ese día claramente había llegado y se negaron a escucharlo”.
“Si a lo largo de seis años, hemos construido todo esto juntos, código de ética,Ombudsman, unidad de investigaciones especiales, ustedes lo dinamitan […] ¿quién orquestó todo eso?”, cuestionó.
Durante su mensaje, Carmen Aristegui sentenció:
“No está México para aceptar prácticas echeverristas”.
“Como periodistas, sabemos que lo primero son las audiencias […] decenas de miles de voces piden que los periodistas se queden”, dijo, recordando las numerosas manifestaciones que la ciudadanía ha hecho en su apoyo en calles y redes.
“Luchemos juntos esta batalla que, no lo duden ni un instante, es una batalla por la libertad”, concluyó.
Durante la ronda de preguntas y respuestas, donde la periodista contestó a las cuestiones que le fueron planteadas a través de Twitter, negó haber hecho un uso indebido de la marca MVS. “No, no hubo dolo, no hubo lucro y no hubo ninguna ventaja”, dijo.
A la interrogante de si buscaría otro espacio, Aristegui contestó que, como principal objetivo, pretende el regreso a un espacio “que hemos construido juntos y que no podemos perder”.
La comunicadora se dijo abierta a dar entrevistas a todos sus colegas e incluso a entablar un debate en torno al tema.
“¿Hasta dónde es posible relacionar el caso con el condicionamiento de la banda de 2.5 GHz?”, preguntó un cibernauta más, refiriéndose a la tecnología que MVS ha pretendido por largo tiempo y cuyo uso le ha sido negado por las resoluciones de las autoridades, en el marco de la #ReformaEnTelecomunicaciones. Son muchos los que ha especulado que el despido de la periodista obedece a una oferta del gobierno federal de permitir el acceso a tal tecnología a cambio. Aristegui contestó que no tiene “la evidencia contundente pero todo el entramado y la manera de hacer las cosas sugieren alguna intervención”. Se reservó de hacer más aseveraciones .”Estas historias se sabrán, pero ahora sólo las conocen ellos”.
Aristegui se dijo segura de que “que contará en algo este pedacito de historia” en lo que quede escrito sobre el ejercicio del periodismo durante este sexenio.