Mientras muchos depredadores desgarran, muerden y mastican a sus presas, algunos prefieren la vía fácil: tragárselos ENTEROS. Uno de esos casos es la pitón, que en África es conocido por devorarse a sus presas sin necesidad de masticarlos. A ver si Quique Garay le pregunta ¿te la comes?
Fíjense estimados lectores amantes de la naturaleza, que en la reserva natural Moremi Game, ubicada en Botswana, un fotógrafo fue capaz de captar el proceso y el momento en que una pitón se tragó ENTERO a un antílope impala, lo que demuestra que este reptil es todo un troglodita.
Fred von Winckelmann, originario de Eindhoven, Holanda, fue el oportuno fotógrafo que pudo retratar el momento en que la pitón se cenaba a su presa de una forma “poco elegante”. Con un movimiento característico de las serpientes, esta pitón se safó un poco la quijada y con eso le cupo todo (sin albur) el antílope, con cuernos, pezuñas y todo. Para ella no se desperdicia nada.
Sin decir buen provecho ni nada, acá les dejamos los instantes que utiliza la pitón para devorarse al antílope.
¿Qué se puede aprender de esto?
Cuando me inviten a los tacos, en vez de comer despacito, lo único que haré será safarme la quijada y así me podré devorar el trompo al pastor. #Fat