En un hospital de Ohio, Estados Unidos, médicos transplantaron un riñón a un paciente equivocado. Esto significó que dejaran al destinatario original esperando la cirugía que salvaría su vida, señalaron autoridades del país vecino el lunes pasado.
¿Qué se sabe sobre esta cirugía?
De acuerdo con información de The New York Post, los Hospitales Universitarios de Ohio, Estados Unidos, transplantaron un riñón a un paciente equivocado, por lo que dejaron al destinatario original esperando el órgano. Por esta razón, a través de un comunicado que dieron a este medio, se disculparon y anunciaron que ya comenzaron una investigación para saber por qué se dio este error.
“Estamos consternados de que haya ocurrido un error recientemente que resultó en que un paciente recibiera un riñón destinado a otro”, se lee en el boletín que compartieron. Por otra parte, indicaron que el paciente equivocado afortunadamente era compatible con el órgano, y que ahora se encuentra recuperándose. Lo malo es que la otra persona seguirá esperando.
¿Cuándo se dio el transplante del riñón a un paciente equivocado?
Este error en la cirugía se dio el pasado 2 de julio, por lo que ahora funcionarios del centro médico informaron a United Network for Organ Sharing, la cual supervisa los trasplantes. Ahora se encuentran revisando este accidente “para comprender qué llevó al error y asegurarse de que tal evento nunca vuelva a suceder”.
También dieron a conocer que ya ofrecieron disculpas a los pacientes y familiares: “Hemos ofrecido nuestras más sinceras disculpas a estos pacientes y sus familias”. “Reconocemos que nos confiaron su cuidado. La situación es totalmente incompatible con nuestro compromiso de ayudar a los pacientes a recuperar la salud y vivir la vida al máximo”, concluyeron.
Cabe señalar que, según información de Cleveland.com, este sistema hospitalario ha realizado 95 trasplantes de riñón este año y 194 en 2020, citando datos de la Red de Adquisición y Trasplante de Órganos del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos.
*Con información de The New York Post