Ralph Persson es un cazador de la provincia de Jämtland, en Suecia, que hace unos días se encontraba con su esposa en un bosque de esa provincia entrenando a su perro. De pronto fueron sorprendidos por un enorme oso que emergió de los arboles.
Cualquiera en su lugar se hubiera quedado pasmado y probablemente hubiera sido víctima de un ataque mortal. En caso de un encuentro así, los expertos recomiendan a las personas “hacerse las muertas”, sin embargo, Ralph decidió gritar con todas sus fuerzas para espantar al oso. Y el plan le funcionó muy bien.
Lo sucedido fue grabado tanto por una cámara que él sostenía, como por otra que tenía su mujer:
“¿Tirarse al piso y hacerse el muerto? Yo no creo en eso. Grité tan fuerte como pude y me hice grande”, fueron las declaraciones de Persson sobre lo ocurrido al portal The Local.
Y es que estamos en la época en la que los osos comienzan a despertar después de meses de hibernación.
Así que ya saben, si algún día se encuentran en un bosque sueco y los ataca un oso, pueden gritarle. Aunque no nos hacemos responsables si la estrategia no funciona.