Esta es una iniciativa que el IMSS lanzó para garantizar la atención digna de las comunidades LGBT+ en sus hospitales y unidades. Y es que si bien ya había presentado el protocolo para el acceso a la atención médica sin discriminación, el Instituto acaba de estrenar uno más.
Se trata del Protocolo de Atención a personas pertenecientes a las poblaciones lésbico, gay, bisexual, transexual, travesti, transgénero e intersexual (LGBTTTI), que es obligatorio de cumplir para el personal médico y administrativo del Seguro Social.
Por aquí te contamos lo más importante de este protocolo que todo mundo debe conocer —tanto personal del IMSS como derechohabientes y población en general—, sobre todo para que el sistema de salud público garantice una atención médica digna e informada, en medio de las discriminaciones que estas comunidades han vivido.
El Protocolo de Atención a personas de las comunidades LGBT+
El documento —que puedes checar por AQUÍ— cuenta con un diccionario de conceptos relacionados con la diversidad, pero también da las pautas para que el personal del IMSS realice su chamba sin discriminaciones.
Para empezar, este protocolo es general, aplica para todas las personas servidoras públicas del Instituto Mexicano del Seguro Social —no importa su puesto o jerarquía.
La segundo es que da la pauta para el trato digno a las personas de las comunidades LGBT+ —desde las personas trans hasta las familias homo y lesboparentales.
Aquí un par de puntos:
Dar atención de calidad y trato respetuoso que contemple:
El respeto de los derechos humanos y las características de las personas.
Dar información completa, veraz, oportuna y entendida por la persona derechohabiente.
Ser amable y tener empatía.
Referirse a las personas conforme su identidad y expresión de género:
Utilizar el nombre social y pronombre correspondiente.
Llamar a la persona por su apellido cuando no se tiene seguridad si el nombre que figura en los registros es el que utiliza o no se puede confirmar.
Informar a la persona que para los trámites o servicio que pide, en la documentación que se expida se va a usar el nombre legal que acredita su personalidad.
Utilizar el lenguaje incluyente.
Evitar hacer cuestionamientos negativos relacionados a la identidad u orientación de la persona.
Se trata de los primeros pasos del IMSS en la capacitación de su personal para la atención a las comunidades LGBT+, que tanto hace falta en el sistema de salud público.