Este último proceso electoral ha sido probablemente uno de los más sangrientos en la historia de nuestro país. Desde que comenzó, en octubre del año pasado, hasta ahora han muerto más de 21 personas por algún conflicto político. Desde candidatos y precandidatos hasta coordinadores de campaña, funcionarios, militantes o familiares, han sido asesinados en plena contienda electoral.
Esta situación hace más evidente la relación tan estrecha que existe entre nuestro gobierno y el crimen organizado y la incapacidad de las autoridades para proteger, además de a los periodistas, a los propios políticos.
Hoy en la mañana hubo otro intento de asesinato contra un político. Esta vez iban contra Arturo Figueroa, el regidor electo del municipio de Villagrán en Guanajuato. El regidor fue baleado cuando iba en su coche saliendo de su casa. Actualmente se encuentra grave en el hospital.