Malas noticias para varias mamás y abuelitas alrededor del mundo. Falleció el día de hoy el gigantesco cantante griego Demis Roussos.
Gigantesco en varios sentidos, aparte de su cuerpo corpulento y rechoncho, mismo que lo hizo vestir una especie de túnicas/vestidos durante su época de mayor éxito, el señor Roussos era poseedor de una voz inigualable, una especie de falsetto operático que le dio su sello característico.
Este señor, nacido bajo el nombre de Artemios Ventouris Roussos, deleitó los oídos melosos de muchas señoras que lo escucharon durante los 70 y 80 con grandes hits como “Forever and Ever”, “Goodbye My Love, Goodbye”, “Can’t Say How Much I Love You”, “When Forever Has Gone”, aparte de componer la música de la serie británica Abigail’s Party.
Sin embargo, para pocos es conocida su etapa como cantante de Rock, con la oscura banda Aphrodite’s Child, un combo Progresivo en el que militó ni más ni menos al lado de otro prominente músico griego: Evangelos Papathanassiou, más conocido como Vangelis (quien décadas después se convertiría en pionero del New Age). Con Aphrodite’s Child, tuvo buena respuesta a finales de los 60 y principios de los 80, con una mezcla de Progresivo pesado salpicado de tintes Pop. Grabaron tres estupendos álbumes: End of the World (1968), It’s Five O’Clock (1969) y 666 (1972) siendo éste último una pieza de colección y culto entre los conocedores del género.
El voluminoso cantante, quien muchos años estuvo batallando con la obesidad, falleció el día de hoy a los 69 años en un hospital de Grecia, aunque aún no se ha dado a conocer la causa oficial de su muerte.
En México, sus canciones tuvieron tal éxito, que se hizo famosa la imitación/parodia que le hacía Eduardo Segundo, de la pareja cómica, Los Polivoces.
Descanse en paz, Demis Roussos.