Mientras muchos a lo más que llegamos al ir por un helado es a toparnos con el jefe de manzana, este jovenzuelo pudo tomarse quizá una de las selfies más costosas de la historia…
“Costosa” no porque le hayan cobrado por tomarla, sino porque en su autorretrato capturó a dos de los hombres más acaudalados del mundo: Warren Buffett y Sir Paul McCartney.
La imagen fue lograda luego de que un amigo del chico de 16 años le comentó que en la heladería local, en Omaha, Nebraska, había un ruquillo que quizá le interesaría conocer… nada menos que el ex Beatle.
Tom White, alcanzó a encontrar al autor de “Yesterday” en una banquita y de inmediato procedió a tomar la selfie… sin imaginar que el hombre de a lado era el tercer hombre más rico del planeta… Aunque también llevó un disco y una guitarra para que el músico la autografiara, el guardaespaldas lo impidió, indicándole que podía tomar todas las fotos que quisiera, pero obtener la “poderosa” del ex beatle (o aunque sea saludarlo), no.
¿Y qué andaban haciendo estos dos millonarios juntos?
Bueno, Buffett es residente de Omaha, ciudad en la que McCartney hizo una pequeña parada para descansar de su tour que realiza por Estados Unidos… y pues, los ricos se juntaron.
No se ustedes, pero lo que vale la selfie es la cara del chavo.