Checo Pérez terminó en la segunda posición en el Gran Premio de Malasia, en su segunda carrera, de su segunda temporada en la F1.

Es el mejor resultado para un piloto mexicano en la F-1 desde que Pedro Rodríguez, uno de los hermanos Rodriguez por supuesto, ganara en 1970 en Bélgica. Hoy Sergio Checo Pérez acabó segundo, por delante de Hamilton, Webber y Raikkonen, en una carrera extraña en la que el mexicano término con todo tratanto de rebasar a Fernando Alonso. Y casi lo logra.

La lluvia marcó la carrera desde el primer momento. Justo cuando los coches se colocaron en la parrilla comenzaron a caer las primeras gotas. Sin sorpresas en las primeras vueltas las condiciones meteorológicas empeoraron y una tempestad inundó el circuito de Sepang, Malasia, por lo que la competencia se suspendió casi una hora.

“Quería ganar y pensé que sería posible. Al final no lo conseguí pero estoy muy contento y muy orgulloso con este segundo puesto”, dijo Pérez sonriente tras la carrera.

“Al final de la carrera, cuando iba detrás de Fernando (Alonso), sabía que había que adelantarle lo más rápido posible porque mis neumáticos se desgastaban cada vez más”, explicó el piloto de Guadalajara que hizo una carrera casi perfecta ante su rival español.

“Llegó un momento en el que salí demasiado separado de la primera curva y pasé por la zona que estaba mojada. Tuve la suerte de poder volver a la pista pero ahí perdí la batalla”, lamentó Pérez.

Para la septima vuelta el Checo ya corría tercero, en la novena la carrera fue suspendida por la lluvia y no se reanudó hasta media hora más tarde, el riesgo de perder el control del coche por exceso de agua en la pista y la falta de visibilidad eran demasiado.

Al final, ya cuando la carrera se había reiniciado y sólo faltaban seis vueltas, el Checo, en un titubeó, se salió de la pista, perdiendo unos segundos cruciales. Los segundos que podrían haberlo subido a lo más alto del podio por encima de Alonso.

“Fue muy difícil ganar hoy (a Alonso) porque se paró en los boxes en el mejor momento. Pero habría podido ganar porque el equipo hizo un trabajo increíble. Sólo tuve pequeños problemas en el embrague cuando me detuve en los boxes, que me hicieron perder algunos segundos cada vez. Puedo entender que me pidan sumar puntos porque es muy importante. Este segundo lugar es un gran resultado porque sólo se trata de la segunda carrera del año”, sentenció.

El Checo tiene muy claro a quién dedicarle esta carrera: “Le dedico esta carrera a Frida, mi perrita, que se murió hace poco; a toda mi familia; a toda la gente que me ha apoyado en las buenas y en las malas; a Carlos Slim, que ha hecho un gran trabajo para que yo esté aquí; y en especial a Dios y a mi familia”.

¡Felicidades Checo! Segundo en la F1 no está mal…nada mal.

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