Todo parece indicar que la presidencia de Donald Trump será cruel y despiadada (no sólo con México, sino con la humanidad en general)… pero al menos, también se prestará para la cábula con su terrible humor involuntario. Bueno, ni tan cábula: todo con visibles evocaciones a mandatarios nacionales.
Si algún gringo se atrevió a burlarse de México por tener como presidente a un hombre que se las vio negras para nombrar tres libros (que lo hayan influenciado o no, qué importa: sólo tenía que decir tres títulos), el karma es poderoso y ahora él sabrá lo que se siente. Todo por culpa del flamante próximo ocupante de la Casa Blanca: Donald Trump. Pero antes, recordemos este nada glorioso momento:
Ahora sí.
Al entrevistarlo, Mike Allen y Jim Vandehei –fundadores de la empresa de medios Axios– notaron que el futuro mandatario estadounidense tenía varios libros sobre su escritorio. Así que nomás para rematar la conversación le preguntaron cuáles libros tiene junto a la cama. Como todo sujeto que sabe “ler”, Trump contestó:
“Bueno, puedes ver algunos de ellos allí. Puedes ver algunos de ellos justo aquí. Éste es uno que yo, sólo…”
Q: What books are you reading?
A: Look over there. There are some books. pic.twitter.com/9cItkOPMQ7— Peter Hamby (@PeterHamby) 18 de enero de 2017
Bueno, mala pregunta. Entonces ¿alguno que pueda recomendar?
“Me gustan mucho los libros. Me gusta leer libros. Ahora no tengo mucho tiempo para leer, pero me gusta leerlos.”
Ya, quizás sólo para tener algo que recomendar, agarró Unprecedented: The Election That Changed Everything de Thomas Lake un libro publicado por CNN… Así es: Trump recomienda un libro del medio que él mismo ha dicho que ofrece “noticias falsas”. Y, para rematar, es uno que habla sobre él.
Bueno, al menos no fue The Art of the Deal, el libro que él ¿escribió?
No es la primera vez que Trump evidencia su desinterés por las letras. En julio del año pasado, cuando un reportero le preguntó si había leído la biografía de alguno de los ex presidentes de su país, él simplemente respondió no tener tiempo: “Nunca tengo. Siempre estoy muy ocupado. Ahora estoy más ocupado. Creo que más que nunca”.
De acuerdo con The Washington Post, el hombre que mañana se hará cargo del país más poderoso del mundo ha dicho en diferentes entrevistas que no necesita leer extensamente para llegar a tomar las decisiones correctas. Le basta “con muy poco conocimiento aparte del conocimiento que yo tenía.” Todo aderezado con un poquito de sentido común, “porque tengo mucho sentido común y tengo mucha capacidad de negociación.”
Que dios nos agarre confesados.