La de chamba que va a tener el contador de Trump… si su cliente consigue salir bien librado de la polémica que se ha desatado, luego que en The New York Times se dieran a conocer los (muy chuecos) pagos de impuestos que el presidente ha hecho en los últimos años.
Aunque lo que resulta más escandaloso es saber que en 2016 (año en que ganó la presidencia de Estados Unidos) el magnate sólo pagó 750 dólares de impuestos, los datos que echó el diario gringo dan señales para suponer que desde hace muuuuuucho tiempo Trump hace transas con Hacienda, con las cuales busca tapar sus muy serios problemas financieros.
Por ejemplo, según la investigación del New York Times, Trump pasó casi una década sin pagar impuestos federales sobre ingresos… ¿la justificación? Los contadores del presidente lograron demostrar que sus empresas tuvieron pérdidas mayores a los ingresos.
Ante tal información, uno de los representantes legales de Trump Organization aseguró que la información del rotativo era “imprecisa”. De acuerdo con Alan Garten, el conglomerado del presidente Trump ha desembolsado “decenas de millones de dólares en pagos de impuestos”…
En respuesta a lo anterior, el New York Times asegura que el representante legal de Donald Trump anda mezclando asuntos, ya que una cosa son los impuestos sobre la renta y otra muy diferente los impuestos federales.
En el reportaje firmado por Russ Buettner, Susanne Craig y Mike McIntire, se indica que los mismos 750 dólares de impuestos pagados por Trump en 2016, fueron los mismos que tuvo que desembolsar en 2017, en el primer año de su presidencia…
En lo que respecta a los dos años siguientes (2018 y 2019) no hay información disponible… De hecho, Donald Trump es el único presidente en la historia de Estados Unidos que se ha negado a hacer pública su información fiscal. Por algo será.
De acuerdo con la investigación del New York Times, de cara a la elección presidencial, Trump está acosado por pérdidas y cientos de millones de dólares en deuda vencida que él personalmente ha garantizado.
“También se cierne sobre él una batalla de auditoría de una década con el Servicio de Impuestos Internos por la legitimidad de un reembolso de impuestos de $72.9 millones que reclamó y recibió después de declarar enormes pérdidas. Un fallo adverso podría costarle más de 100 millones de dólares”.
Y todo lo anterior sólo es una probadita… The New York Times advierte que en las próximas semanas publicarán artículos adicionales a esta información.