Sin duda hay mujeres cuya aparición en pantalla debería ser penalizada –cof, señorita Laura, cof- pero difícilmente sería procesado alguien por el simple hecho de salir en TV… sin embargo, a los tribunales de Shanghái ha llegado una demanda que podría cambiar esto. Mmmm, nah, la verdad se ve difícil, pero aun así, la jocosidad de la denuncia es digna de comentarse.
Resulta que un hombre intenta llevar a proceso a la superestrella china Zhao Wei, ya que alega que las miradas que echa cuanto actúa son tan intensas que le han provocado serios “daños espirituales”… pero ahí anda, ¿qué no le podía cambiar de canal?
El supuesto daño se produjo cuando doña Zhao apareció como una de las actrices de la telenovela Madre tigresa, melodramón que aborda la división de una pareja por sus diferencias en los intentos de bien criar a su hija…
Hasta el momento no se ha informado si la gente de los tribunales le ha hecho caso a la solicitud de justicia del obsesionado televidente, quien exige que la actriz le dé una compensación económica, ya considera inaceptable que las miradas con las que reprende a los miembros de su ficticia familia sean también dirigidas a los espectadores… o sea, cuando la actriz mira a la cámara.
Aunque un funcionario ya declaró que no considera “necesario malgastar nuestros recursos judiciales en casos como estos”, el caso de Zhao ha suscitado preocupaciones respecto al nacimiento de este tipo de “demandas frívolas”, ya que por nuevas legislaciones que entraron en vigor el mes pasado, se ha vuelto difícil para los tribunales rechazar reclamos. Ahora se deben proporcionar razones claras para desestimar casos… y el ciudadano tiene derecho a apelar la veces que considere necesario.
Este nuevo sistema se creó para para poner fin a la “conducta obstructiva de los tribunales y funcionarios”, pero el “caso Zhao” ha sido citado como ejemplo de cómo algunos ciudadanos abusan de su derecho a presentar demandas.