La muerte de Paul Walker, ocurrida hace unas semanas, hizo que varios seguidores de las películas Fast & Furious le rindieran distintos tributos. Por desgracia, uno de estos homenajes no terminó nada bien.
Muchos fanáticos a los autos y la velocidad se sintieron especialmente conmovidos después del deceso de Paul Walker, a quien se le relacionó con el mundo del volante después de protagonizar la saga cinematográfica Fast & Furious.
Como un homenaje, un grupo de conductores se reunió en un centro comercial de Aberdeen, Escocia, para encender los motores de sus vehículos. Durante el evento, a uno de los participantes le ganó la emoción, y por más de 20 minutos se puso a revolucionar el motor de su Ford Focus hasta llevarlo al límite.
Fue tanta la sobrecarga, que el auto terminó envuelto en llamas, causando el asombro de los presentes y la intervención de los bomberos, quienes llegaron para sofocar el incendio. Obviamente el auto quedó en condiciones deplorables.
El nombre de este brillantísimo conductor aun permanece anónimo (qué oso weeee), pero ya ha dado mucho de que hablar.
“No puedo entender la mentalidad de una persona para hacer algo así. Si el auto pertenecía a la persona que lo provocó, entonces quizá aprendió la lección. Fue muy afortunado por no haberse hecho daño”, comentó Andrew May, concejal de Aberdeen,
Se sabe que incluso los otros participantes del homenaje, miembros del grupo Track and Street Grampian se mostraron avergonzados por las acciones de este conductor. Uno de ellos se deslindó de la estupidez del conductor del Focus:
“Nosotros no toleramos este comportamiento, pero lamentablemente hay gente que piensa que es apropiado actuar de esta manera. La persona involucrada llevó el motor al limite de revoluciones durante 20 minutos, que es algo imperdonable en cualquier coche.
Debido al calor excesivo y el comportamiento estúpido de su conductor, este coche lamentablemente ardió en llamas”.
El sólo quería ser popular y verse emotivo…