Después de casi dos años, el mejor basquetbol del mundo retorna a nuestro país para un partido de pretemporada. Gustavo Ayón y el Orlando Magic se enfrentaron a los Hornets de New Orleans.
La banda basquetbolera -y la que no tanto- se dio cita en la Arena Ciudad de México. En las inmediaciones del recinto, mujeres, hombres, chamacos y demás, con sus playeras de Lakres, Jazz, Orlando y claro, las míticas de Chicago con el 23 de Michael Jordan.
En las inmediaciones del recinto, se hicieron presentes hombres, mujeres, chamacos y demás con playeras de Lakers, Wizards, Hornets, Orlando, Celtic, y claro, no podían faltar las míticas con el 23 de Chicago Bulls, las de Michael Jordan.
Ya en la duela, la gente hizo una gran entrada, pero en la parte de arriba quedaron huevos, lo que impidió el lleno que en la taquilla nos habían comentado. Le caben 22,400 a la Arena Ciudad de México y asistieron 18,133 por si lo querían saber.
Antes de iniciar el partido, los dos latinos de cada equipo, Greivis Vasquez de los Hornets y Gustavo Ayón dieron un mensaje de agradecimiento al público y mostraron su felicidad por estar en nuestro país con la NBA.
Por obvias razones, la gente decidió “adueñarse” del Orlando Magic y lo alentó durante todo el partido, inclusive se alcanzaba a escuchar, tenue, pero se escuchaba el clásico grito: “defense, defense”.
Ya entrados en el duelo, ambos equipos comenzaron algo flojos e imprecisos a la hora de alzar las manos y lanzar el balón.
No obstante, quien empezó a tomar ritmo para encestar fue Orlando que rápidamente se puso a la cabeza en el luminoso.
Posteriormente, la quinteta de Ayón fue perdiendo ritmo, y los Hornets, comandados por Greivis Vásquez, despertaron. Sin embargo, el partido no contaba con muchos puntos, con decirles que al medio tiempo iban 46-31 a favor de Orlando.
Gustavo Ayón tuvo una participación discreta. Contó con pocos minutos, lo cual parece que será la tendencia de la temporada. Colaboró con 12 puntos, una cifra razonable en razón a los minutos que jugó. Aún así, la gente en todo momento coreó el apellido del “Titán”.
Sin duda el basquetbol de la NBA es uno de los deportes más espectaculares de todos, no sólo por los jugadores, sino por todo el espectáculo inicial, al medio tiempo y entre cada interrupción. Se vuelve todo un “show” gracias a las mascotas y a las porristas. Que me bailen donde sea con sus pompones.
Y así como vino se fue. La NBA en su fin de semana por México y nos dejó queriendo más.
Orlando Magic y Gustavo Ayón perdieron con los Hornets de New Orleans por marcador de 85 a 80.
Ahora, al ver el inumeble y la pasión de los aficionados, ¿la gente de la NBA considerará traer más partidos de pretemporada y alguno oficial a nuestro país?