En torno a la llamada “Ley de Infancias Trans” —que consiste en una reforma a los Códigos Civil y de Procedimientos Civiles para que los niños, las niñas y adolescentes puedan cambiar su identidad de género— han surgido varias posturas. Entre ellas, los argumentos de grupos opositores.
Estos grupos están integrados por el Frente Nacional por la Familia y la bancada del PAN (Partido Acción Nacional) en el Congreso CDMX señalan a esta reforma como un daño jurídico para el bienestar de las familias.
Manifestaciones contra la llamada “Ley de Infancias Trans”
“Por la defensa de las niñas y niños, seguimos dando la batalla contra la Ley de Infancias Trans. Una aberración jurídica inconstitucional, que atenta contra la figura de patria potestad y el interés superior de la niñez”, declaró el diputado local del PAN, Diego Garrido.
En contexto del foro “¿Infancias trans?, ¿perspectivas, realidades y retos” —organizado por la bancada del PAN y el Consejo Mexicano de la Familia, el 20 de febrero de 2020—, Garrido aprovechó para descalificar los esfuerzos de las familias, activistas y especialistas para que los niños, las niñas y adolescentes puedan acceder al derecho de una identidad.
Sin embargo, lejos de ser un foro informativo y veraz que incluyera todas las posturas, esta reunión fue señalada por intentar patologizar a las identidades trans y hasta equiparar la vivencia de los niños y las niñas con la percepción de ser un animal.
Estas observaciones fueron hechas por familiares de los niños y las niñas trans, especialistas y organizaciones como Red de Familias Trans o Asociación por las Infancias Transgénero.
De acuerdo con las asociaciones, el foro organizado por el PAN sólo incitó a la transfobia y a la discriminación —en un tema de por si ya desconocido por la mayoría de los ciudadanos de CDMX.
Este no ha sido el único intento de los opositores para descreditar la mencionada reforma de ley.
En noviembre pasado, mientras en el Congreso local se discutía su aprobación en comisiones el Frente Nacional de la Familia se movilizó para protestar en contra de este esfuerzo, que implica facilitar el acceso de los y las menores de edad a el cambio de acta de nacimiento y, por lo tanto, a una identidad.
El derecho a una identidad
“La discriminación hacia una persona trans no comienza a partir de los 18 años. Una persona trans es discriminada desde el momento en que se asume como tal y en el momento en que su entorno lo percibe como una persona distinta”, explica a Sopitas.com el diputado de Morena Temístocles Villanueva.
De acuerdo con el impulsor de esta reforma, la discriminación hacia las personas trans —y en este caso hacia los y las menores de edad— podría revertirse a partir del reconocimiento del Estado.
¿Cómo? Si el Estado otorga el acta de nacimiento a una niña o niño trans, sin la necesidad de llevar a cabo un juicio; entonces sería el primero en reconocer y garantizar sus derechos.
“Los derechos humanos no se definen a partir de la mayoría de edad, esos son los derechos políticos, el derecho a votar, el derecho a ser votado”, reflexiona Villanueva al explicar que estamos hablando de los derechos de un individuo a desarrollarse conforme su identidad.
“Y esto no puede estar expuesto al permiso de un papá o una mamá”, insiste el legislador. De este punto se desencadena otra polémica que los grupos opositores han creado: el tema de la patria potestad.
Patria potestad y la hormonización: Derribando tabúes
Según el Frente Nacional por la Familia, la patria potestad peligra si la reforma se aprueba en el congreso. Sin embargo, Temístocles Villanueva nos aclara que la reforma lo único que busca es facilitar el proceso del cambio de acta de nacimiento.
¿Cómo? Los niños y las niñas podrán solicitar su cambio acompañados por una de las personas que ejerzan sobre ellos la patria potestad. Es decir, el papá, la mamá o un tutor o una tutora.
Los menores y las menores de edad trans sólo necesitan ser acompañados por al menos uno de sus tutores.
“Estamos buscando que se reconozcan derechos a personas que integran menos del 2% de la población (…) este reconocimiento no impacta absolutamente en alguien más, esta iniciativa sólo va para reconocer los derechos (…) No va a generar mágicamente que todas las niñas y todos los niños crean que son trans”, nos dice Temístocles.
Desde el punto de vista del legislador, es necesario luchar con la desinformación que se ha generado sobre la patria potestad. Además de uno que otro tabú.
Por ejemplo, los grupos opositores han señalado que los y las menores de edad estarán expuestos a operaciones para cambiar su sexo. Pero esto no es cierto.
“No tiene que ver con modificaciones al cuerpo, no tiene que ver con procesos de hormonización, tiene que ver con que en tu acta de nacimiento se manifieste tu identidad de género y cómo te autopercibes”, insiste Villanueva.
En este contexto, en diciembre de 2019 la CDH-DF (Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México) organizó el Foro por el reconocimiento de las Infancias Trans —para informar a la sociedad de qué va la propuesta de reforma a los códigos Civil y de Procedimientos Civiles y cómo puede acceder a una información veraz, en vez de las desacreditaciones.
Tanto el CONAPRED (Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación), como la CDHDF (Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México) y la Unicef se han pronunciado de manera positiva ante esta reforma y han pedido a los legisladores que garanticen los derechos de los niños, las niñas y los adolescentes para vivir una vida libre de discriminación, violencia o segregación.