Y a todo esto, ¿cómo debemos manejar en la lluvia?

Decir que estamos en la temporada de las lluvias es quedarnos cortos. En las últimas semanas, la CDMX ha vivido algunas de las tormentas más dramáticas de su historia, y como no estamos ni cerca de que el agua pare, es recomendable tomar precauciones, sobre todo si nos toca manejar y queremos evitar cualquier tipo de accidentes.

Y es que, aunque seamos conductores experimentados, conducir debajo de lluvia es un desafío. La visibilidad disminuye, el pavimento es inestable, el conductor no tiene el control total sobre el auto y mucho menos sobre las acciones de los otros automovilistas.

Por si lo anterior fuera poco, según cálculos del Centro de Experimentación y Seguridad Vial de México, en época de chubascos los accidentes de coches se incrementan de un 15% a un 20% debido a que el agua y los residuos de aceite y gasolina hacen que el asfalto se vuelva más resbaloso y que muchos vehículos se patinen.

En medio de este escenario, y porque tener una buena cultura vial es responsabilidad de todos, vale la pena adaptar ciertas medidas, antes, durante y después, para salir de la temporada de lluvias sin ningún contratiempo.  

¿Qué riesgos debemos tener en cuenta cuando manejamos bajo la lluvia?

Manejar debajo de una gran tormenta conlleva varios retos. En ese sentido, lo primero que hay que tomar en cuenta es que las reglas cambian y no debemos conducir como lo hacemos comúnmente. Para evitar incidentes, hay que estar conscientes de los retos que nos encontraremos en el camino.

Uno de los desafíos más grandes es la poca visibilidad; cuando el agua cae sin parar, los conductores se enfrentan a distorsión de la luz; esto limita su capacidad de acción. Y es que a veces los parabrisas no son suficientes para contemplar el camino, menos cuando hay bruma o niebla.

Otro factor que hay que tener en cuenta son los encharcamientos. Se trata de un problema que es muy común en la capital mexicana. Sólo en el aguacero del jueves pasado, la alcaldía de Iztapalapa registró 31 charcos profundos. Estos pequeños ojos de agua pueden dañar la transmisión y la marcha de los vehículos.

Finalmente, hay que tomar en cuenta la pérdida de tracción de las llantas. La lluvia tupida y el aceite forman una combinación letal que hace que el pavimento se cubra de una capa resbalosa, gracias a la que las ruedas pueden perder contacto con la superficie y por lo tanto, complicar las maniobras de los conductores.  

Algunos consejos para manejar en la lluvia

Con esto en mente, aquí les dejamos algunos consejos prácticos que se pueden hacer todos los días para que manejar en la lluvia no sea traumático. La intención es que estos tips sirvan para que nadie tenga un percance en el camino.

*Reducir la velocidad

La lluvia genera una serie de condiciones que no podemos controlar. Por eso es muy importante estar al tanto no sólo de nuestra velocidad, sino de la de los demás. Cuando hay lluvia extrema, se debe manejar debajo de los límites, mantener una velocidad constante y tener cuidado de frenar y acelerar cuando se debe.

*Aumenta la distancia de seguridad

Todos los expertos recomiendan duplicar la distancia respecto al vehículo que va delante de nosotros. En caso de tormenta, el coche requiere más espacio para frenar sin peligro, acelerar en suelo resbaladizo y evitar los chorros de agua improvisados, que surgen en el camino cuando el conductor de enfrente avanza.

*Revisar el coche antes de salir

En temporada de lluvias, es indispensable mantener en buenas condiciones las llantas, y sobre todo, revisar que los frenos y amortiguadores estén en buen estado. Por otro lado, también se recomienda inspeccionar los limpiaparabrisas, ya que si emiten algún sonido o dejan rastros de tierra a su paso, hay que cambiarlos a la brevedad.

*Cuando llueve, SIEMPRE hay que encender las luces

Una de las mejores formas de hacerle frente a la falta de visibilidad es el uso adecuado de nuestros faros. Las autoridades nos exhortan a encender las luces de niebla, esto hace que los otros conductores nos vean mejor. También, si la lluvia está muy recia, hay que poner las intermitentes, sobre todo con los cambios de carril anticipados.

*Elige bien tus caminos y apaga el coche si estás en una inundación   

Antes de salir, infórmate sobre inundaciones y encharcamientos para, en la medida de lo posible, prevenirlos. 

Ahora, si es inevitable, se deben cruzar las zonas cubiertas con agua muy despacio y con mucha precaución. Hay que evitar atravesar charcos mayores de metro y medio y en caso de estar varados en una zona de inundación profunda, apagar el carro inmediatamente.

¿Tú qué opinas, tienes algún consejo para ayudarnos?