Lo que necesitas saber:
El circuito de Monza tiene un total de 11 curvas, la mayoría de ellas son de alta velocidad
El circuito de Monza es historia pura en Fórmula 1 y es conocido como ‘El Templo de la Velocidad’ y sede del Gran Premio de Italia. Se trata de un trazado rápido y a la vez desafiante, que permite rebases constantes, pero además es la casa de los Tifosi de Ferrari, de modo que suele tener vida roja en las tribunas.
En este circuito corrió por primera vez un mexicano en Fórmula 1, con Ricardo Rodríguez, en 1961. Pero también ha sido sede y testigo de grandes tragedias, como el fallecimiento de Jochen Rindt, el único piloto campeón de la categoría después de la muerte, así como la del alemán Wolfgang von Trips y Alberto Ascari.

Origen y nombre de las curvas de Monza
Cada una de las curvas en Monza tiene un nombre y como tal una historia peculiar, así que aquí te contamos cada una de ellas.
Prima Variante: Así se la llaman a las dos primeras curvas, las más lentas y angostas del circuito, que se introdujeron en 1972 con la finalidad de reducir drásticamente la velocidad de los autos al final de la recta principal, en la cual se alcanzan fácilmente los 300 kilómetros por hora.


Biassono: Es la tercera curva y se toma a alta velocidad. Hace muchos años, la familia Blasoni construyó una fortaleza cerca de esa zona y a su vez ésta dio nombre a un poblado conocido como Biassono, de modo que esta curva hace referencia a esta localidad que es habitada por poco más de 11 mil personas.

Curva della Roggia: También es conocida como segunda variante. Es un conjunto de dos curvas lentas y su nombre original tiene que ver con el hecho de que muy cerca de ese lugar corre un pequeño arroyo.

Lesmo 1 y 2: Entre cada una de estas curvas hay una distancia de 100 metros, por lo cual también fue conocida como “Curva dei 100 Metri”. También recibió el nombre de “Curva delle Querce”, es decir, curva de os robles.
Su nombre actual está relacionado con un poblado que está prácticamente del otro lado de la calle y donde habitan poco más de siete mil personas.

Varante de Ascari: Es un conjunto de tres curvas y su nombre rinde homenaje a Alberto Ascari, un piloto italiano que ganó dos veces el campeonato de Fórmula 1, en 1952 y 1953. Lamentablemente, Ascari perdió la vida en 1955, en un accidente en el circuito de Monza, justo en la zona que ahora lleva su nombre.


Curva Parabólica, el emblema del circuito de Monza
Parabólica: Fu rebautízala como ‘Curva Alboreto’ en homenaje a Michele Alboreto, quien falleció en 2001. Sin embargo, hasta ahora sigue siendo conocido popularmente como ‘Parabólica’ y tiene que ver con su trazado, que dibuja una parábola.
Esta curva es la más popular y la más desafiante de Monza, y por lo tanto ha sido testigo de numerosos accidentes, incluido el impacto fatal de Jochen Rindt.



