Hollywood apenas se está abriendo a los subtítulos. En el mercado comercial del cine, sobre todo en Estados Unidos, se resisten a la vatiedad de idiomas, y fuera de las películas que se nominan al Oscar en la categoría, justamente, de Mejor Película de Habla no inglesa, pocas veces se hablan de las producciones más destscadas de otros países.
De hecho, una de las formas en la que se podía hablar de otras cintas era cuando se anunciaba un remake. Si una película producida fuera de USA o el Reino Unido hacia suficiente ruido, pronto se anunciaría un remake con actores de la lista A de Hollywood. ¿Funcionaban? No siempre, y de hecho, suele ser un poco desastroso el resultado.
Por mencionar un ejemplo, está El secreto de sus ojos, producción argentina de Juan José Campanella de 2009 que en 2015 recibió un remake titulado Secret in their Eyes en manos de Billy Ray Chiwetel Ejiofor, Julia Roberts y Nicole Kidman. ¿El resultado? Mejor ni hablarlo… Podemos también mencionar otros casos como el de Abre los ojos que se convirtió en una controvertida Vanilla Sky, etcétera.
Por acá les dejamos algunos remakes que sí valen la pena porque le hacen justicia a la historia, porque respetaron los puntos más brillantes de las producciones originales, o porque extendieron de buena manera a los personajes y su desarrollo.
Funny Games
Michael Haneke
En 1997, Michael Haneke estrenó Funny Games protagonizada por una familia que va de vacaciones a su hermosa casa de verano. Al llegar, dos jóvenes amables y educados los reciben, pero lo hacen con mucha insistencia, por lo que la madre llamada Anne, comienza a sospechar que algo raro sucede.
Pero ya es muy tarde. Los jóvenes los secuestran en su propia casa y los mantienen vivos, bajo torturas físicas y mentales, hasta la mañana siguiente. No es la primera vez que lo hacen, y ciertamente no será la última. La película es aterradora en todo sentido sin necesidad de que el director nos muestre las partes más gore. Sino apelando a la psicología de los personajes: unos padres asustados y desesperados frente a unos sujetos que los lastiman por el placer que surge de la mera posibilidad de hacerlo.
10 años después, el mismo Michael Haneke trabajó en un remake de Funny Games, titulada de la misma manera, para alcanzar a las audiencias anglo. Protagonizada por Naomi Watts y Tim Roth, seguimos la misma historia. Y eso es lo que la hace genial, pues Haneke no agregó ningún mensaje o lección relacionado con su nueva audiencia y la geografía o el idioma de la producción.
De nueva cuenta fue el horror por el horror de ver a un par de hombres crueles sin ningún motivo detrás, sin respaldarse en una ideología o sin pretender obtener algo: el juego es divertido para ellos mientras cumplan su promesa de asesinar a todos en la casa antes de que amanezca.
Suspiria
Dario Argento / Luca Guadagnino
Amazon Prime Video
Suspiria es, quizá, la película más conocida y exitosa de Dario Argento. Se estrenó en 1977 y formó parte de una trilogía a la que le siguieron Inferno en 1980 y The Mother of Tears de 2007, todas relacionadas con la figura de tres “brujas” llamadas Mother Tenebrarum, Mother Lachrymarum y Mother Suspiriorum (la última, evidentemente, de la película que hablamos).
Aquí conocemos a una estudiante de baile de Estados Unidos que llega a una academia en Alemania donde, con el tiempo, descubre que está establecida en actos siniestros que chocan con una serie de muertes brutales (como la de la estudiante que la misma protagonista reemplazó).
En 2018, Luca Guadagnino trabajó en un remake titulado también Suspiria con el protagónico de Dakota Johnson y Tilda Swinton. La primera da vida a Susie Bannion, quien llega a la Helena Markos Dance Company de Berlín, llamando inmediatamente la atención de las autoridades del lugar.
Guadagnino no se guardó ningún secreto para el final de la cinta, como en la original. Sino desde un inicio comienza a revelar información con la intención de presentar una atmósfera sobrenatural de la cual, tanto el espectador como la protagonista, no pueden escapar.
La chica del dragón tatuado
Niels Arden Oplev / David Fincher
Claro Video
Una de las sagas literarias más exitosas de los últimos años es la Trilogía Millennium del periodista y novelista sueco Stieg Larsson, la cual se convirtió, como era de esperarse, en una franquicia fílmica que arrancó en 2009 con Los hombres que no amaban a las mujeres dirigida por Niels Arden Oplev y protagonizada por Noomi Rapace y Mikael Nyqvist.
El primer protagonista es el periodista Mikael Blomkvist, quien tras ser acusado de difamación por una investigación fallida, es contratado por un millonario sueco para investigar quién de su familia mató a Harriet, su sobrina que desapareció en la década de los 60. Mikael lo hace con la ayuda de Lisbeth Salander, una hacker.
En 2011, David Fincher tomó la primera parte de la trilogía para hacer La chica del dragón tatuado, esta vez con la participación de Daniel Craig y Rooney Mara, respetando la ambientación gélida y aislada de Suecia, en donde también participaron Stellan Skarsgård y Christopher Plummer.
La película recibió varias nominaciones a los premios Oscar entre las que destacan para Mejor Actriz para Mara, Fotografía, Sonido y Diseño de producción, por la cual se llevó el Oscar. Otro de los puntos más memorables de la cinta, fue el trabajo de Trent Reznor y Atticus Ross para la música.
12 Monkeys
Chris Marker / Terry Gilliam
Netflix
Dudamos en poner a 12 Monkeys en esta lista, pues como tal, no es un remake, sino la versión extendida de un cortometraje francés de 1962. Sin embargo, el título original es tan genial, y la versión de Terry Gilliam de 1995 también, que decidimos sumarlo para hablar de ambas producciones.
Primero estuvo el gran documentalista Chris Marker, quien trabajó en La Jetée como un cortometraje de ciencia ficción con aparente material de archivo, quizá su única película de ficción. Escuchamos la voz de un narrador, quien pone al centro de la historia a un hombre con un recuerdo (el rostro de una mujer y la muerte de un hombre), el cual nació antes de que la superficie de la Tierra quedara “podrida” por la radioactividad como consecuencia de una Tercera Guerra Mundial.
Relacionado con los viajes en el tiempo y la memoria, el hombre del recuerdo se da cuenta que de niño fue testigo de su propia muerte. Esta idea la retomó Gilliam para 12 Monkeys donde un hombre con un recuerdo, viaje del futuro al pasado para encontrar el momento exacto en el que se detonó el desastre del mundo y por el cual es inhabitable en la superficie.
Gran parte de la historia se desarrolla en un hospital psiquiátrico donde encuentra a los personajes que han de participar en la historia que narra el principio del fin de la humanidad. El elenco está liderado por Bruce Willis junto a Madeleine Stowe, Brad Pitt, Christopher Plummer y David Morse.
The Departed
Andrew Lau y Alan Mark / Martin Scorsese
The Departed y Martin Scorsese se llevaron el Oscar a Mejor Película y Director en 2006. La película es una de las más aclamadas, en general, del cineasta neoyorquino y uno de los clásicos entre las historias de mafias. Además, el elenco es brutal con Leonardo DiCaprio, Matt Damon y Jack Nicholson a la cabeza.
Y si bien la genialidad de Scorsese en los detalles (eso de las “x” es una maravilla) y el ritmo acelerado participan en ese reconcimiento, la enredada y frustrante historia no nació en Boston con la infame relación entre la mafia y los policías de la localidad. En realidad, es una película hongkonesa protagonizada por Tony Leung y Andy Lau. Pero vamos por partes.
En 2002, Andrew Lau y Alan Mark estrenaron Infernal Affairs para mostrarnos a dos infiltrados: un destacado policía que servía como rata para la mafia de Hong Kong; y un infiltrado de la policía para revelar los siguientes pasos de la figura más grande del crimen. Ambos tienen de tarea revelarse a sí mismos como las respectivas ratas de sus organizaciones.
Hay diferencias sustanciales entre ambas películas. Infernal Affairs dura unos 100 minutos mientras The Departed suma otros 50 minutos, lo cual permite que se desarrollen más los personajes principales. Otra diferencia es que la cinta de Scorsese es rápida y con humor negro, mientras la original es más melodramática.