Por Miguel Ángel Delucio | @miguel_delucio
Los Indianapolis Colts pensaron que cuando se fue Peyton Manning tendrían que esperar mucho para sustituirlo. Pasó un año y encontraron en el Draft a Andrew Luck, quien rápidamente se convirtió en su líder, presente y futuro de la franquicia.
Sin embargo, los últimos años no han sido los mejores. Constantes lesiones y baja de juego le han valido ya no ser considerado uno de los mejores. Para este 2017 inició en la lista de lesionados (temporal). Todo apuntaba que regresaría a media campaña pero no fue así.
El equipo de la capital de Indiana anunció que Luck no jugará este año. Así, su días deberían de estar contados.
The #Colts will place Andrew Luck on IR: https://t.co/VcSVoizmqB
GM Chris Ballard press conference to follow shortly. pic.twitter.com/DvXSrSwkuj
— Indianapolis Colts (@Colts) 2 de noviembre de 2017
No todos los días se encuentra a un buen mariscal de campo, eso es seguro. La cuestión aquí es que la relación costo-beneficio entre los Colts y Andrew ya no es la mejor. Por lo tanto, hay más de una razón para que Indianapolis se deshaga de él.
El golpe en el tope salarial
Lo que consume Andrew Luck del salary cap es una verdadera mentada. En total al final del año va a recibir entre bonos y sueldo 41 millones de dólares.
Esto ha creado una cosa: poco espacio para contratar y retener a los jugadores. Cuando alguien ocupa tanto espacio en el tope, lo que provoca que es que la gerencia tenga que maniobrar de manera más apretada para firmar agentes libres.
Por todo esto, poco a poco los Colts se han quedado sin talento y sin la oportunidad de contratarlo.
Las constantes lesiones
Ya se mencionó, pero es otro aspecto que Indianapolis tiene que considerar. Son muchas lesiones y no pequeñas. Desde cirugía para reparar su hombro del brazo con el que lanza hasta un riñón lacerado por un golpe.
Por supuesto, todo atleta profesional está expuesto a esto, pero Andrew no ha sabido cuidarse. Su estilo de juego es intrépido, rayando en lo descuidado. Más de una ocasión tomó capturas y tacleadas en jugadas que no lo valían.
Así, es mejor darle las gracias, empezar de cero y buscar nuevos horizontes con otro mariscal de campo.
El valor que le pueden sacar
En la NFL siempre veremos cambios que no entenderemos. Jay Ajayi por una cuarta selección de Draft se nos hace poco y luego otros como el de Jimmy Garoppolo que parece demasiado. Y en eso, siempre hay mercado para un mariscal, aunque esté viejo, lesionado o haya demostrado poco.
Andrew Luck tiene 28 años, así que ya no es un chavito. Ha tenido buenas temporadas y eso le da currículum. Entonces, equipos como los Cleveland Browns o New York Giants que andan buscando QB podrían pagar una buena cantidad por él.
Sin problemas le podrían sacar una primera ronda, que en estos años tiene muchísimo valor. Vienen buenos jóvenes en el Draft 2018 como Lamar Jackson o Sam Darnold que podrían ser el futuro.
Te quitas el problema del salario de Luck, empiezas con una cara nueva y te das oportunidad de firmar jugadores talentosos alrededor del novato que traigas.
