La Roma se convirtió en el primer campeón de la Conference League, el torneo que la UEFA ha hecho para aquellos equipos de que por nivel o mala suerte, no pudieron llegar o permanecer en la Europa League. El equipo italiano venció al Feyenoord en el estadio Air Albania.
Con ello, José Mourinho es el primer estratega que puede presumir (o no) que ha ganado todos los torneos de la UEFA a nivel de clubes: Champions League, Europa League y ahora Conference League.
Mourinho cuenta con dos Champions League en su historia, al frente del Porto, en 2004, y del Inter de Milán en 2010. La Europa League la conquistó en 2003 con Porto y en 2017 con Manchester United.
Estos títulos nos los tiene, por ejemplo, Josep Guardiola o Jurgen Klopp, aunque no es algo que ambos deseen realmente, pues han permanecido casi durante sus carreras en la Champions, que se puede entender como la Primera División de los torneos europeos.
Durante mucho tiempo, el estratega nos acostumbró a verlos en los banquillos de la Champions, pero el lusitano se ha alejado de la élite de Europa desde que salió del Manchester United, aunque de igual manera pasará a la historia de su actual club, que es bien conocido en el futbol del Viejo Continente, aunque históricamente no es un club ganador.
De hecho, este es el primer torneo europeo en la historia de la Roma, desde 1961, cuando los romanos conquistaron la extinta Copa de Ferias, que después se transformó en Copa UEFA y luego en Europa League.
Mourinho, casi una garantía de títulos en cada club
El título de la Conference League también nutre la leyenda de que José Mourinho es garantía de títulos en cada equipo en el que se para desde su etapa con el Porto, salvo una excepción, y esa excepción se llama Tottenham.
A lo largo de su carrera, Mourinho ha dirigido a seis equipos: Porto, Chelsea, Inter de Milán, Real Madrid, Manchester United, Tottenham y Roma. Con todos ha aportado al menos una liga o una copa, como sucedió con Manchester, al que le dejó en las vitrinas la Carabao Cup y la Community Shield entre 2016 y 2017.
Por ello fue fichado en su momento por Tottenham, el primer equipo con el que no ganó ningún título desde que inició su carrera en Portugal al frente del Benfica y después Leira, aunque con ninguno completó una temporada.