Ganador del Balón de Oro, goleador y titular indiscutible de la Selección de Italia. Roberto Baggio aseguró más de 100 penales pero falló el más importante de su carrera en la final del Mundial de Estados Unidos 94.
A pesar de su intachable trayectoria y sus 318 goles, hoy el exjugador de la Juve es más recordado por la mítica fotografía que lo muestra devastado en una especie de oda a la derrota.
La foto está tomada desde atrás de la portería y se concentra en una silueta cabizbaja parada sobre el pasto con camiseta azul. Una postal bastante similar a lo que vimos con Messi en el Mundial de Brasil 2014.
Una oda a la derrota: Las diferencias entre perder antes y ahora
20 años separan a ambas fotografías que presentan la misma narrativa: La caída de un ídolo. No obstante, aquel fallo de Roberto Baggio marcó para siempre al nacido en Caldogno; mientras que la foto de Messi es una más entre las millones que ya existen sobre el argentino.
¿Por qué será que las imágenes de la derrota se vuelven tan icónicas como las de la victoria? Para analizar esta situación nadie mejor que alguien que trabajó de cerca con el FC Barcelona y con Lionel Messi.
En el capítulo de hoy en Las Cosas que da el Futbol platicamos con Santiago Garcés sobre la inmediatez de la información en el futbol, el “morbo” de ver a una estrella derrotada, los seudoanalistas deportivos de hoy y hasta de la historia de una de sus fotos más famosas.
Sí, nuestro amigo Santi es el autor de este FOTÓN cuando el Barca hizo la épica y remontó al PSG en 2017. (Checa la entrevista que le realizamos hace unos años)
Al ver obras de arte como la de Santiago Garcés podemos llegar a dos conclusiones: La primera es que hace falta más contenido con crítica y corazón como los que escribía el uruguayo Eduardo Galeano en épocas de Mundial y la segunda es que la saturación de información también nos ha llevado a acostumbrarnos a lo extraordinario en términos futbolísticos.
Gracias a los dioses del futbol tuvimos la oportunidad de disfrutar a dos genios como Cristiano Ronaldo y Lionel Messi en su máximo esplendor. Vimos al rosarino callar al Santiago Bernabéu y a CR7 ovacionado por todo el mundo tras su chilena contra la Juventus. Sin embargo, lejos de agradecer nos enfrascamos en discusiones baratas sobre quién es el mejor.
En este sentido es inevitable sentir que el futbol pierde algo cuando tantos “expertos” se niegan a comunicar la realidad y a crear personajes “apasionados” que lo único que hacen es demeritar el periodismo deportivo por crear polémicas baratas que suban el rating.
El legado
Todos recordamos a Maradona y a Pelé con la Copa del Mundo en sus manos pero a nadie le importa si Diego Armando pasó cinco partidos sin anotar en la liga o si ‘O Rei’ era eliminado de la Libertadores.
Mientras que las victorias —y fracasos en el caso de Baggio— son cuadros en un museo, el legado de Messi y Cristiano son más bien como feeds de Instagram scrolleados a toda velocidad.
¿Cuál será la nueva postal de Messi? ¿Una con el trofeo de Qatar 2022 u otra más como la de Roberto Baggio?