Luego de venir con el ánimo a tope después de la estupenda actuación de Landry Jones la semana pasada, los Steelers una vez más decepcionaron a sus aficionados tras caer ante los Chiefs de Kansas City en un partido muy cerrado por las defensas.
La primera mitad terminó 9-3 a favor de los locales. Festival de patadas con ambos quarterbacks incapaces de progresar cuando entraban en la zona roja rival. A Alex Smith le da lo mismo si tiene al lado o no a Jamaal Charles o Jeremi Maclin. Siempre puede apoyarse en Travis Kelce cuando llegan los momentos difíciles y ha encontrado un buen relevo en el backfield con Charlcandrick West, que sumó 110 yardas de carrera y un touchdown en la mejor serie ofensiva de los Chiefs en todo el partido, que además comenzó tras la segunda intercepción a Landry Jones poco después de la reanudación.
La diferencia 16-3 parecía insalvable para los Steelers, con muy poca pegada en ataque, pero fueron capaces de responder con un touchdown de Martavis Bryant con una recepción de 19 yardas(16-10) y en la siguiente serie de su equipo LeVeon Bell fue parado in extremis cuando parecía escaparse imparable en una carrera de 42 yardas que terminó con otro field goal que acercó a los Steelers a tres puntos en el marcador (16-13).
En las últimas semanas los de Pittsburgh han sido muy hábiles cerrando partidos igualados, pero esta vez no estuvieron tan acertados. Alex Smith consiguió mantener vivo el drive decisivo, primero con un pase a Kelce en tercer down y más tarde culminándolo con un pase de 6 yardas a Chris Conley para finiquitar la enorme victoria y dar el golpe.
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