El partido contra Trinidad y Tobago en el Nemesio Díez no sólo sirvió para preparar a la Selección Sub 22 rumbo al torneo preolímpico, también para los intentos de la Federación Mexicana de Futbol para erradicar el grito que ha sido calificado como homofóbico, sin embargo, fue un fracaso.

La federación mandó un mensaje en conferencia de prensa para hacer conciencia de que el grito le podría costar puntos en la eliminatoria mundialista, ya que la FIFA hizo reformas, de modo que en caso de expresiones racistas u homofóbicas provocarían que un partido fuera suspendido y los puntos se le darían al rival de manera automática o en su caso, jugar el partido a puerta cerrada.

 

La Liga MX se unió a esta campaña y también suspenderá partidos para erradicar el grito al portero rival, el cual se hizo presente en la cancha de Toluca, sin embargo, al ser un partido de preparación sin reconocimiento de FIFA, no habrá sanciones, aunque para los próximos, correspondientes a la Cocacacaf Nations League, la historia será diferente.

A través de la cuenta oficial de la Selección Mexicana, se hizo énfasis a esta situación. “Por gritos como el que acabamos de escuchar en el Nemesio Díez, a partir de nuestro próximo partido se interrumpe el partido (sic), y los obligará a salir del estadio”.

 

Como capitán de la Selección Mexicana, Raúl Gudiño leyó un mensaje a la afición previo al silbatazo inicial para pedir a al afición no emitir dicha expresión, pero en cuanto hubo un saque de meta, la afición recetó al portero trinitario.

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Sergio Ramírez es periodista egresado de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García, con más de 10 años de experiencia en medios de comunicación. Ha trabajado en Diario Estadio, La Razón de...

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