Como parte de un acuerdo con la Comisión Nacional del Mercado de Valores (SEC, por sus siglas en inglés), Elon Musk ha tomado la decisión de abandonar temporalmente su puesto como director de Tesla Motors. Además, accedió a realizar un pago de 40 millones de dólares en los que se incluye una multa y otras concesiones.
De acuerdo con lo que informa The New York Times, todo se debe a una reciente demanda por fraude que la SEC hizo contra la compañía de autos eléctricos. Para que este asunto no escalara de manera negativa, se acordó que Musk renunciaría a su papel como director de la junta durante por lo menos tres años. Por otro lado, se le ha permitido conservar su lugar como CEO.
La acción legal en contra de Tesla -que quedó resuelta justo este sábado- se llevó a cabo debido a una serie de tweets que hizo su fundador. El pasado 7 de agosto, Elon Musk publicó que “tenía asegurados los fondos” para sacar de bolsa a su compañía, ya que podía hacer una compra de 420 dólares por acción.
Am considering taking Tesla private at $420. Funding secured.
— Elon Musk (@elonmusk) 7 de agosto de 2018
Los reportes agregaron que, como resultado indirecto, estos posts de Twitter causaron que las acciones de Tesla aumentaran un 6% durante la fecha de su publicación, cosa que afectó de manera significativa varios valores en el mercado.
Finalmente, el caso obviamente terminó como una denuncia por fraude, ya que la SEC señaló que esta operación potencial “era incierta y sujeta a numerosas contingencias”. Si a eso se agrega el hecho de que nadie conocía los detalles del financiamiento, así como de su precio, entonces se conoce completamente el motivo de la demanda.
Estos sin duda son tiempos oscuros para Musk, su compañía y todos los proyectos que se tenían contemplados para el futuro. Ahora sólo nos queda esperar para ver cómo evoluciona este caso (que bien, ya parece cerrado pero no lo está), así como sus consecuencias.