¿O lo premian por aguantar?
El caso es que Rodney Cotton, un rendidor preso oriundo de Brooklyn, será indemnizado con la nada despreciable de 750 mil dólares, ya que durante el encierro previo al juicio al que sería sometido, sufrió tormento chino y durante seis días estuvo como brazo de mecánico, lo cual le provocó “lesiones permanentes en su pene”, razón por la que –además de unas buenas pomadas- llegó al acuerdo de seis cifras.
Pero bueno, vamos desde el inicio de este dramón: todo empezó cuando Cotton fue recetado con un antisicótico para tratar el trastorno bipolar que padece… aunque por sí solo el medicamento no tiene la potencia de 20 viagras, el sujeto también tomaba tratamiento contra malestares del corazón, asma, diabetes y otras muchas dolencias… de ahí que el cóctel químico le hizo no bajar la guardia durante seis largos días…
“Bueno, estando encerrado en una celda bien podría haber pasado el tiempo tejiendo chambritas”, pensarán muchos… pero ni eso, tal era la rigidez ciclopesca que presentaba Cotton que le era imposible tocarse sin sentir gran cantidad de dolor: “me dolía, comenzaba a punzar”… Pese a las suplicas del hombre de 50 años, fue ignorado por las autoridades del Centro de Detención de Manhattan.
“Hizo numerosas quejas de una condición priapismo, mal para el que la enfermería no tenía las ni la atención ni las instalaciones adecuadas”, señala el abogado de Cotton. En efecto, pese a su doloroso andar de pingüino, sólo recibió una bolsa de hielo y una Tylenol… “Tenía que usar calzoncillos o boxers… pero me hicieron caminar con jeans por casi una semana”.
Al principio el ex convicto demandó 10 millones de dólares, lo cual le fue negado llegando a alcanzarse el acuerdo de los 75 mil verdes… pero –según la víctima- en las condiciones que quedó, el dinero no vale nada: “Si tuviera que elegir entre la recompensa y tener mi hombría restaurada, elegiría mi hombría en un instante”, dijo Cotton, quien ha estado encarcelado durante 39 de sus 50 años, incluyendo un período de prisión por un caso de homicidio en Brownsville, esto en de 1989.
¿O alguien se aventaría a pasar por esto por unos cuantos dólares?
Cotton tuvo que ser operado de emergencia, le fue implantado un catéter en el pene… de ahí lo regresaron a la cárcel; pero nomás un ratito, ya que al mes siguiente tuvo que retachar al hospital para que le fueran retirados los puntos que se le incrustaron en… auchhh, sin anestesia. Total que al final perdió su amiguito perdió su función más divertida y no sólo eso… también fue mutilado… y a pesar de eso continúa con dolores y malestar.
¿Todo eso vale $75.000.00?
*Vía NY Daily News