Ya en este mundo podemos esperar lo que sea de cualquiera, porque hay gente que de plano no tiene escrúpulos. Así lo demuestra un video que se hizo viral desde Argentina, con un hombre en muletas como protagonista de una bronca de esas que parecen una broma… pero no son.
El asunto estuvo en que este sujeto, mencionan por ahí, andaba pidiendo limosna. Sin embargo, se encontró con alguien que habría descubierto que estaba fingiendo y se armaron los trancazos. Y como se darán cuenta, el tipo supuestamente estaba discapacitado se ‘curó’ mágicamente.
También puedes leer: Chale: Le pidieron mil 500 manzanas con caramelo a un vendedor pero le quedaron mal
Hombre en muletas ‘se cura’ y lo captan peleando con otro sujeto
Sí, puede parecer increíble, pero hay gente que finge estar discapacitada para pedir dinero en la calle. Ya habrán escuchado antes alguna historia similar y aunque hay varias de ellas, no deja de resultar un poco desconcertante que eso suceda. Pero bueno, qué se le va a hacer…
Ahora, sucedió en la provincia argentina de Pergamino, esto en Buenos Aires. En un video que circula en redes sociales, podemos ver cómo un hombre en muletas y otra persona -un hombre que aparentemente iba en su moto- se van a los golpes, mientras la bronca se va haciendo cada vez más intensa.
En el video, se puede ver al hombre en muletas retrocediendo de su agresor, quien no lo deja de seguir en ningún momento. Pero a medida que pasan las acciones, se ve que el ‘discapacitado’ puede caminar a la perfección y escapa de los golpes del otro tipo.
Y no solo eso ya que el sujeto agarra las muletas para defenderse de la persona que buscaba golpearlo. La cosa se puso tensa tanto que en un momento, el otro señor le quitó las muletas al presunto ‘inválido’ (que ya vimos que no era) y este último, hasta se echó a correr porque ya se andaba llevando unos cates de aquellos.
De acuerdo con el diario La Voz de Argentina, el enfrentamiento se dio por un tema vial, aunque no se sabe a ciencia cierta qué fue lo que desencadenó que se empezaran a golpear. Lo que sí quedó claro es que al menos el hombre de las muletas, se la pensará dos veces antes de fingir una discapacidad.