Investigadores de Nueva Zelandia han encontrado una USB en el interior de las heces congeladas (las habían guardado para una investigación) de una foca leopardo y todavía funciona. ¿Qué archivos almacenaba?

Primero lo primero. Las heces de la foca estaban resguardadas en el Instituto Nacional de Agua y Investigación Atmosférica de Nueva Zelandia (NIWA) y llevaban ahí más de un año. Sin embargo, recientemente Jodie Warren, una voluntaria del instituto, descongeló estas muestras para “sacar todas las cosas asquerosas”… y en su lugar encontró una USB.

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Shutterstock

Bien, lo sabemos, esto puede ser gracioso en un principio pero no debemos olvidar que se trata de plástico y claramente no está bien que se encuentre dentro del estómago de una criatura del mar.

Es muy preocupante que estos asombrosos animales antárticos tengan este tipo de plástico dentro de ellos”, comentó la voluntaria en un comunicado.

De acuerdo a CNN, gracias a las heces recolectadas de estos mamíferos, los científicos del NIWA pueden obtener información sobre lo que comen estos animales, su estado de salud y hasta el tiempo que las focas se mantuvieron en aguas neocelandesas.

La muestra que descongeló Warren fue una que un veterinario recolectó en 2017 en una playa en la isla sur de Nueva Zelandia… ¿y qué tenían adentro? Fotos de las vacaciones de una persona desconocida que, al parecer, se topó con algunas leones marinos.

Entre los archivos que lograron rescatarse se encuentran varias fotos de lo que parecen ser unas lindas vacaciones así como un video (acá arriba lo puedes ver) de una persona que se topa con una leona y su bebé. Quizá la única pista del dueño de la USB.

Si estos archivos son tuyos, el NIWA está dispuesto a devolvértelos a cambio de una pequeña recompensa: una muestra de heces de leones marinos.

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