Intentar asaltar a alguien con una pistola de juguete puede parecer buena idea en una mente criminal. Pero las víctimas no siempre van desarmadas y eso deja al asaltante en una clara desventaja que puede llegar a ser letal. Eso fue justo lo que pasó en Argentina.
Resulta que el pasado jueves 3 de noviembre, un hombre de 54 años terminó con la vida de un asaltante en la comunidad de San Justo, muy cerca de Buenos Aires.
El criminal era un joven de apenas 19 años y el intento de asalto se produjo cuando la víctima estaba en su auto. Todo quedó grabado en video y gracias a eso sabemos cómo ocurrieron exactamente las cosas.
Un intento de asalto con un arma de juguete que terminó mal
La escena transcurre en poco menos de un minuto. Pablo Miguel K, un ingeniero eléctrico que estaba estacionado en ese lugar porque se dirigía a trabajar, fue abordado por el joven asaltante, quien le apuntó con el arma de juguete.
Obviamente la víctima no tenía idea de que se trataba sólo de una réplica de una pistola de verdad, por lo que en cuestión de segundos abrió la puerta del auto pero no para entregar sus pertenencias. Un disparo a quema ropa fue suficiente para que el agresor se fuera hacia atrás, cayera al suelo y muriera en instantes.
En la grabación ya no se observa, pero de acuerdo con el medio local El Argentino, el hombre que disparó se fue del lugar para estacionarse metros más adelante. Un vecino alertó a la policía al notar el cuerpo del joven sobre el suelo y no tardaron en dar con el auto, por lo que arrestaron a Pablo Miguel K.
La familia del asaltante pide justicia
El asaltante fue identificado como Ulises Leonel Camacho Ulunque y encontraron que tenía un mes de haber salido de prisión por otro robo. Mientras tanto, Pablo Miguel K. quedó en libertad al comprobarse que portaba su arma legalmente; además, un juez determinó que actuó en legítima defensa al desconocer que el arma del agresor era de juguete.
Ahora bien, como siempre hay dos lados de la moneda, la familia del asaltante quiere justicia por su muerte pese a que él fue quien intentó robar al hombre de 54 años. “No sé qué habrían hablado o cuál habrá sido la discusión que mantuvieron. ¡Pero el arma era de juguete, era una réplica!”, reclamó su abuelo.
Lo que quizá sí se le puede reclamar a quien terminó por quitarle la vida, es que se fue y dejó el cuerpo ahí por alrededor de una hora. Pero en fin, la justicia ya dictó su veredicto en este caso.