La historia de Kevin Berling, originario de Kentucky en Estados Unidos, se ha vuelto viral alrededor del mundo por lo peculiar del asunto. En 2019, este hombre de ahora 29 años demandó a los laboratorios Gravity Diagnostics (lugar donde trabajaba como técnico) luego de que sus gerentes y compañeros le hicieron una fiesta sorpresa de cumpleaños. Sí, así como lo leen.
El asunto es que el sujeto tuvo un ataque de pánico en ese momento y experimentó uno más cuando sus jefes lo citaron a una junta al siguiente día para que él les explicará su comportamiento. Luego de todo ello lo despidieron, él los demandó y bueno, tras dos años de litigio, una corte decidió que la empresa debe pagar un buen dinerito al afectado.
La historia del empleado que demandó a su empresa por una fiesta de cumpleaños
Sí, lo sabemos: ¿en realidad existe alguien que demandaría a su empresa por una fiesta de cumpleaños? Y por más extraño que eso suene, es real. Kevin Berling llevaba 10 meses trabajando en Gravity Diagnostics (GD) y en algún momento del 2019, le dijo a su gerente que por favor no le organizaran una fiesta de cumpleaños en la oficina como regularmente lo acostumbra la compañía. El tema es que este hombre sufre de trastornos de ansiedad y ataques de pánico.
Sin embargo, aunque la advertencia estaba hecha, a su gerente se le olvidó aquella petición. Entonces, Kevin llegó un día a la oficina y se llevó la sorpresa de que le tenían preparada la celebración en el trabajo. Su reacción casi inmediata fue salir de ahí para encerrarse en su coche durante la hora del almuerzo e intentar tranquilizarse.
La cosa no paró ahí pues sus jefes lo citaron a una reunión para que él explicara su comportamiento, lo que le provocó al empleado otro ataque de ansiedad. Después de aquella junta, la gerencia de GD despidió a Kevin bajo el argumento de que les preocupaba que estuviera enojado y que se pusiera violento eventualmente en algún otro momento.
Berling evidentemente reaccionó: levantó una demanda contra la empresa. De acuerdo con un reporte de la cadena CBS, las acusaciones señalan que Gravity Diagnostics discriminó a Kevin por una discapacidad y que tomaron represalias contra él solo por exigir una adaptación razonable dentro del ambiente de trabajo de la compañía.
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Y se vino el veredicto
Pues bien, luego de prácticamente tres años de analizar el caso, la jueza Julie Brazil y un jurado en la ciudad de Kentucky llegarón al veredicto de que Gravity Diagnostics debería pagarle 450 mil dólares (más de 8 millones 900 mil pesos mexicanos) a Kevin. La compensación del dinero cubre las acusaciones por salarios y beneficios perdidos -ya que la empresa tuvo un crecimiento enorme durante la pandemia-, salarios futuros y por haberle hecho pasar “dolor y sufrimiento mental pasado, presente y futuro, angustia mental, vergüenza, humillación, mortificación y pérdida de la autoestima“.
Tony Bucher, abogado de Kevin, dice que la jueza conoció a su cliente y fue en ese instante en que se dio cuenta los señalamientos de Gravity Diagnostics contra su exempleado eran exagerados. Se dice que la compañía puede apelar la decisión del jurado, pero no se sabe si planean hacerlo. Como sea, ahora Berling tiene prácticamente asegurado un buen dinerito por lo sucedido. ¿Qué opinan de toda esta historia?