Si se desconectaron de la internet (y del mundo), en la últiman hora, probablemente se perdieron de uno de los momentos más épicos en el show del medio tiempo del Super Bowl. Si no saben a qué nos referimos, les contamos un poco: Justin Timberlake llevaba un show emotivo e impresionante y antes de finalizar, decidió subirse a las gradas a cantar “Can’t Stop The Feeling” con la gente. En eso Ryan McKenna, un niño de 13 años, se robó los reflectores por muchas razones. La mayoría de ellas desastrozas.

Primero, el niño no podía tomarse una selfie con JT (sepa la bola si fue porque estaba muy emocionado, nervioso o ambas). Después, todos bailaban (eso sí, con el celular en mano), al ritmo del príncipe del pop cuando el niño parecía que no tenía idea de lo que estaba pasando. Y para su mala suerte, la cámara no se movió de ahí hasta que acabó la presentación.

Y ustedes saben que la internet no perdona nada, por lo que los memes de este niño comenzaron a salir hasta por debajo de las piedras. Y para no perder la bonita costumbre aquí les dejamos los mejores.

 

 

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Redactora de música, entretenimiento y noticias. Llevo siete años en medios de comunicación y he tenido la oportunidad de conocer, entrevistar y escuchar en vivo a mis artistas favoritas.

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