Un escenario hipotético: llegas a casa de un amigo tuyo sin avisar y su familia te dice que está en su cuarto. Entras sin haber tocado la puerta y ves a tu camarada frente a su computadora, mirándote fijamente a los ojos, haciendo un movimiento desesperado para apagar el monitor y tratar de lucir relajado (porque no lo está) mientras te dice “Qué onda güey, ¿qué haces aquí?”
Si alguna vez cacharon a su amigo en una situación como esa o ustedes eran ese sujeto, no deben preocuparse. Sólo gustan de ver algo de porno en sus ratos libres. La cuestión aquí es, ¿qué tan seguido corren el riesgo de estar en esas circunstancias?
Mirar videos porno se ha convertido en una actividad recurrente para la gente -sobre todo la que usa internet- y por eso últimamente existen estudios que tratan de calcular cuánta pornografía es consumida en cierto tiempo. De hecho, la información de varios medios indica que tan sólo en Pornhub, las personas han invertido 4,600 millones de horas viendo videos durante el año pasado. Esto es muchísimo más tiempo que el usado para construir el Empire State.
Y eso sólo en 2016, señoras y señores…
El estimado de horas vistas en un sólo sitio de internet es es realmente asombroso, ¿no? Ahora piensen que la cantidad aproximada de videos por persona en el mundo es de 12.5 y traten de hacer el cálculo sin volverse locos.
Por otro lado, también hay que tomar en cuenta que no todos los seres humanos miran porno con la misma frecuencia. Algunas personas reprueban el acto por distintas razones (su religión, la forma en que los educaron, etc.), otras simplemente son indiferentes porque sólo lo usaron durante la adolescencia. También hay quienes lo usan a menudo para liberar las presiones y por supuesto, hay cierto grupo de individuos quienes ya tienen una adicción fuerte.
Un estudio realizado en Université Laval, en Quebec, dividió a los usuarios de este material en tres categorías: consumidores por motivos recreativos, consumidores que buscan eliminar tensiones y por último, los consumidores compulsivos. Para determinar la en qué categoría se encuentra la gente, se creó un cuestionario especial que fue respondido por 830 participantes del campus.
Según los reportes de New York Magazine, aproximadamente 71.8% de las personas que participaron eran mujeres y 28.2% eran hombres. La mayoría de ellos se identificaron como heterosexuales (82.8%), mientras otros grupos más pequeños dijeron ser homosexuales (5.8% y bisexuales (11.6%).
Otros resultados también mostraron una información bastante interesante relacionada con las tres categorías que mencionamos antes:
Consumidores por motivos recreativos
Este grupo de individuos tuvo porcentajes sumamente bajos en cuanto al esfuerzo realizado para ver porno y la presión emocional asociada con el tema. También se reveló que estas personas normalmente están en una relación y sólo ven 24 minutos de videos eróticos por semana.
Consumidores que buscan eliminar tensiones
Quienes sienten culpa u otras emociones negativas después de mirar pornografía, tan sólo recurren a su uso 17 minutos por semana y lo hacen para deshacerse del estrés causado por el trabajo y otras circunstancias difíciles en su vida.
Consumidores compulsivos
Del porcentaje de gente que consume alrededor de 110 minutos de porno a la semana, se encontró que en su mayoría se trataba de hombres. Un detalle encontrado en esta categoría es que normalmente los sujetos suelen evadir la interacción sexual con su pareja (en caso de que la tengan).
Por último tenemos el porcentaje promedio de personas que entran en los tres perfiles mencionados: un 75% de los participantes eran consumidores por motivos recreativos (en su mayoría mujeres o personas en una relación amorosa); 12.7 % eran quienes sólo consumen material pornográfico en internet para eliminar el estrés; y sólo el 11.8% por ciento es conformado por aquellos que prefieren ver videos eróticos ante cualquier cosa en la vida.
Si podemos opinar al respecto, pensamos que nadie es mejor o peor persona por usar pornografía. No se trata de juzgar a alguien por el modo en que decide satisfacer sus necesidades. Sólo queríamos compartir algo de información con ustedes en caso de que alguna vez hayan sentido curiosidad de saber si la cantidad de contenido erótico que consumen está por debajo o por encima del promedio.
Y ustedes, ¿cuánto porno ven por semana?