El pasado fin de semana uno de los autos eléctricos de Tesla sufrió un accidente, provocando la muerte de su conductor, Walter Huang, un ingeniero de Apple. Según CNN, el auto estaba en modo de piloto automático.
En un comunicado, la compañía reveló que durante los seis segundos previos al choque, las manos del conductor no se encontraban en el volante, de acuerdo a los registros del sistema de autodirección; esto pese a que, según Tesla, la máquina advirtió en repetidas ocasiones al conductor que tomara el volante.
Aunque la función de piloto automático dirige algunas funciones, ésta no es autónoma.
“El piloto automático de Tesla no previene todos los accidentes – ese nivel sería imposible – pero sí hace menos probable que ocurran”, comunicó la empresa.
Por ahora, la Junta Nacional de Seguridad del Transporte de Estados Unidos (NTSB, por sus siglas en inglés) está investigando el caso.
Según la compañía de autos, en el incidente también influyó en gran parte a que la estructura de protección no estaba en el momento del choque, cuando normalmente se encuentra ahí para seguridad de los conductores.
En días pasados, otro incidente pero con un Uber, terminó con la vida de un peatón. Al parecer el auto iba en completa autonomía cuando sucedió el accidente.
