Y hoy en “Mundo enfermo y triste”… No cabe duda alguna de que la humanidad es una de las especies más peligrosas de todo el planeta, pues solita ha provocado el deterioro de ecosistemas y la desaparición de algunas especies, algo que parece preocuparle sólo a unos cuantos.
Sin embargo, una foto que se ha hecho viral ha provocado que varios nos pongamos a pensar si realmente estamos haciendo algo por las demás especies.
Y es que en las Islas Maldivas, en Asia del Sur, una tortuga salió del agua para anidar sus huevos, sin embargo, la pequeña se encontró con que la playa en la que hacia esto ya no existe, por lo que no tuvo de otras más que dejar sus huevos ahí, en la pista de aterrizaje del aeropuerto de Maafaru. Ay 😞
De acuerdo con el diario local The Edition, la tortuga comenzó a caminar en la pista para buscar un lugar adecuado para anidar y al no encontrar un sitio seguro, la pequeña lanzó sus tres huevos en el asfalto. Lo más triste de todo es que la protagonista de esta historia es una tortuga verde (Chelonia mydas), la cual según la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), se encuentra en peligro de extinción.
A pesar de que los habitantes de la zona afirmaron que esta es la primera vez que este tipo de tortuga aparece, se sabe que Maafaru es conocido por ser un sitio en donde las tortugas van a anidar (o al menos cuando era una playa), y es por eso que muchas viajan cientos de kilómetros para llegar a este lugar a dejar sus huevos, pues los expertos aseguran que estos reptiles realizan el proceso de “desovar” en el mismo lugar donde nacieron.
La imagen de la tortuga con sus huevitos se ha vuelto viral, pues muestra la manera en la que el hombre ha alterado el hábitat de esta especie en pro de su desarrollo industrial y económico, sin importarle el destino de esta especie y otras más.
Cabe mencionar que en el lugar donde está el aeropuerto también se está trabajando en la construcción de un complejo turístico que ocupará gran parte de una playa donde las tortugas van a anidar cada año, algo que sin duda preocupa a varios ambientalistas, pues no saben cuál será el destino de las tortugas y su especie con este tipo de proyectos turísticos.
