Los asiáticos son unos loquillos, o bueno, por lo menos los tailandeses, quienes tienen una moda que nos sacó mucho de onda.
Resulta que desde hace mesas, la sensación por allá son unas muñecas llamadas Look Thep (algo así como Ángeles Infantiles, en tailandés). Aunque están medio gachas, su encanto radica en que están poseídas. Hagan de cuenta como Chucky, el Muñeco Diabólico, sólo que en lugar de tener dentro el espíritu maligno de un asesino, tienen el de un ángel o el de un ser celestial, el cual es invocado por medio de rituales espiritistas.
Su creadora es la medium tailandesa Mananya Boonmee, Mama Ning pa los cuates, quien dice puede comunicarse con Parvati, una deidad hindú. Desde hace tres años, por medio de magia blanca Mama Ming comenzó a invocar a espíritus celestiales y a los ángeles para que se alojaran en estos juguetes, y protejan y brinden beneficios a sus dueños, quienes a cambio tendrán que cuidarlas y alimentarlas.
– Ay no mams!
… fue lo primero que pensamos cuando leímos lo anterior, pero al parecer los tailandeses están tomándose la cosa tan en serio, que incluso en la aerolínea Thai Smile, que forma parte de Thai Airways, puedes reservar boletos para que estas muñecas encantadas viajen contigo, no como equipaje de mano, sino como unas tripulantes más, con derecho a ocupar su propio asiento y a recibir los alimentos (claro, pagando el precio de un pasajero convencional y registrándolas con el nombre de su dueño).
Dicha decisión fue tomada después de que en las últimas semanas al menos 40 pasajeros abordaron con una Look Thep. Las únicas condiciones para volar con ellas es que no las sienten junto a las puertas de emergencia, que tengan el cinturón de seguridad puesto y que no ocupen la fila 34, reservada para personas que requieren cuidados especiales a bordo.
También hay restaurantes donde puedes ordenar que les sirvan comida, siempre y cuando el dueño se asegure de que esa comida no se desperdiciará.
No es raro ver que haya gente paseando estas muñecas por las calles, les compre ropa y accesorios y los trate mejor que a sus propios hijos. Al parecer el ser alivianado con las muñecas le trae beneficios a los dueños, pues no son pocos los que han reportado prosperidad en sus negocios y en su vida desde que tienen uno de estos juguetes. En fin, hay que cuidarlos y alimentarlos como si tuvieran vida.
Eso sí, tener una de estas monas no es nada barato, pues sus precios van de los 2 mil a los 11 mil bahts tailandeses, que es más o menos de 55 a 305 dólares. Aunque ojo, hay modelos especiales que han alcanzado los 100 mil bahts tailandeses (2,700 dólares). Osea, nada baratas. Si ustedes tienen esa millonada y la cotización del peso frente al dólar les hace lo que el viento a Juárez, pueden ordenar su propia muñeca poseída por un espíritu buena onda en la página childsangel.com.
Aunque insistimos, al menos la cara no la tienen angelical.
Sin embargo no todos están contentos con estas muñecas. Por ejemplo, Chakthip Chaijinda, jefe de la Policía Tailandesa advierte que permitir que viajen con tantas libertades en los aviones podría favorecer el traslado ilegal de droga, por eso pidió a las autoridades de inmigración poner especial atención en ellas.
¿A ustedes les gustaría tener una de estas muñecas buenas con cara maligna o de plano les da miedo y piensan que son cosas del Diablo?