El lunes les platicamos sobre la manifestación que miles de indignados españoles llevaron a cabo en la Puerta del Sol de Madrid para conmemorar un año del surgimiento del movimiento 15-M. En medio de estas protestas, una corresponsal de televisión sufrió el robo de su teléfono celular mientras reportaba en vivo los incidentes de la manifestación.
Ángela Gallardo Bernal, corresponsal de RT transmitía las incidencias desde el lugar de los hechos. Antes de entrar al aire, apoyó su teléfono en el piso para hacer el enlace con mayor soltura. Entonces uno de los asistentes a la marcha (con playera negra sin mangas y brazos tatuados) se dio cuenta del descuidó, se acercó discretamente y le hurtó el aparato.
Después de haber realizado el enlace, la corresponsal se percató del robo.
Pues sí, la verdad es que Ángela (que no está de mal ver) sí pecó de confianza. ¿No habría sido mejor guardarse el teléfono en una bolsa o entregárselo a un elemento de la producción? De cualquier forma, eso no justifica el robo.