Sucedió ayer, no muy lejos de la Sopicueva. Un empresario de bienes raíces fue asesinado poco antes del mediodía, en una calle de la colonia Nápoles de la Ciudad de México.
Como cada miércoles, Jaime Quiroz Gutiérrez de 59 años se dirigía a su oficina ubicada en el número 151 de la calle Nueva York. Además de dedicarse a las bienes raíces, se desempeñaba como presidente de la Asociación de Colonos de Lomas Country Club, en Huixquilucan, donde también residía.
Al llegar, descendió de su vehículo Honda Accord negro. Mientras su chofer estacionaba el auto, Jaime Quiroz recibió dos disparos. Uno en el rostro, el otro en la parte posterior de la cabeza.
Al parecer lo estaban esperando.
Hay dos versiones de los testigos. La primera sostiene que los disparos provinieron de un auto en marcha. La segunda, proporcionada por policías del lugar, menciona que el agresor fue una persona a pie, quien después de los disparos subió a un vehículo color negro que lo esperaba.
Para disipar dudas y saber cuál de las dos versiones era la correcta, se pensó en acudir a la cámara de seguridad del ‘Proyecto Bicentenario’ ubicada en la esquina de Nueva York con Texas. ¿Pero qué creen? que según las autoridades policiacas, el follaje de un árbol estorbó la visión…
¡¿Qué les cuesta revisar periódicamente si los campos de visión de las cámaras de seguridad no son obstruidos por algún objeto?!
Ya se iniciaron las investigaciones de la Procuraduría Capitalina, quienes descartan el robo como línea principal, pues al occiso no se le despojaron sus pertenencias. Todo apunta a que se trató de una venganza. Los agresores conocían los horarios de la víctima, quien sólo acudía a esa oficina los días miércoles.
Quiroz recién había llegado al Distrito Federal ayer a las 2 de la mañana, procedente de un viaje al extranjero. Durante su gestión como administrador de Lomas Country, Jaime Quiroz diseñó e implementó un sistema de seguridad conformado por 15 perros de rastreo, 80 policías privados, 75 cámaras de video, y un moderno sistema de radares de seguridad e identificación de rostros.
Todo para que él y sus vecinos vivieran seguros…
Como dato adicional, hace año y medio el hijo de este empresario falleció a los 26 años a causa de leucemia. Como respuesta, Jaime Quiroz creó una fundación para combatir esta enfermedad.
Una historia cómo muchas del país. Por desgracia cada vez ocurren más cerca de todos. ¿Qué motiva tanto odio?