Quizá Joe Montana sea una de las pocas leyendas vivientes del deportes estadounidense. El ex mariscal de campo fue todo un símbolo para los 49’s de San Francisco para terminar su carrera en los Jefes de Kansas City.
Ahora, en este 2013 parece que “la sangre llama”. Y es que el único hijo de Joe Montana, Nate, intentaría seguir los pasos de su padre y probaría suerte en el Pro Day, en las instalaciones de los 49’s con sede en Santa Clara, pero eso todavía no es un hecho, pues la lista no ha sido anuncia por parte de los actuales subcampeones de la NFL.
El heredero de las glorias de Montana jugó en cuatro universidades diferentes: Pasadena City College, Notre Dame (donde jugó su padre), Montana y West Virginia Wesleyan de la División II. En esta última, Nate inició nueve partidos la temporada pasada y completó 225 de los 436 pases que lanzó para 2,480 yardas y 19 touchdowns con siete intercepciones y 12 capturas.
La semana pasada se presentó en el combinado regional de los Vaqueros de Dallas en donde, de acuerdo a un reporte de NFL.com, tuvo problemas para realizar lanzamientos de estilo profesional y su actuación no fue buena.
Los expertos auguran que en este próximo Draft, Nate Montana no será elegido por alguna franquicia, pero podría conseguir la invitación para ir a entrenar con algún equipo de la NFL.
¿Honrará el apellido Montana o pasará de noche?