El pasado sábado en Holanda se celebró el Día del Rey, y para celebrarlo la Familia Real de aquella nación visitó la ciudad de Amstelveen. Todo era risa, realeza y diversión hasta que alguien osó a tortearse a la Reina.
Como si se tratara del metro Pantitlán un lunes a las 7 de la tarde, la Reina Máxima de Holanda, se encontraba saludando a varios plebeyos durante el evento en Amstelveen, cuando de pronto sintió una mano aventurera recorrer la llanura de su trasero real y no, no era la mano del Rey, quien también se encontraba presente y ni por enterado que le estaban pedaleando la bicicleta. La reina, como es toda una dama, fingió demencia y continuó saludando a la gente.
Todo esto hubiera pasado desapercibido, si no fuera porque todo fue captado en un video donde se escucha a uno de los presentes gritar “¡Están tocando su trasero!”.
Aquí el video:
Pues sí, la verdad nos pareció guapetona la Reina y todavía aguanta, pero esa no es justificación, ni nunca lo será, para andar de mano larga. Hay quienes aseguran que esto fue sólo un accidente. Por lo pronto, el pobre Fred ya dio su versión de los hechos, y piden que no se le catalogue como un calenturiento libidinoso (en otros tiempos, por menos de esto le hubieran cortado la cabeza). Ésto comentó a la televisión holandesa:
“No me acuerdo y de ninguna manera lo hubiera hecho de forma consciente. Sé muy bien que esto no está bien. Pudo haber habido una distancia de un centímetro entre nosotros”.
Pues ahí están las imágenes, como dicen en los programas matutinos para señoras: la mejor opinión la tienen ustedes en casita.