Xi Jinping, presidente de China, está desde ayer en nuestro país como parte de una visita de estado. Su estadía nos está demostrando que ahora más que nunca, hay cosas que sólo pasan en México… o en Los Simpson. Chequen y verán…
Se supone que la visita de un presidente a otra nación es un acontecimiento de suma importancia y que generalmente es tratado con mucha solemnidad. En México también intentamos dar “el gatazo” aunque no siempre nos sale. En el caso de la visita de Xi Jinping, todo ha resultado pintoresco.
Empecemos con la bienvenida. Después de años de no hacerlo, volvimos a la tradición de llenar Viaducto con banderitas mexicanas y del país del distinguido visitante. Al estilo de la propaganda electoral, esta avenida casi siempre caótica lució sus mejores galas (o eso piensan quienes mandaron a “decorarla”). Estaría bueno saber qué opinan los visitantes. Según nosotros estos adornitos ni lucen.
Todos hemos visto las fotos de los fastuosos desfiles militares chinos (que por cierto, hacen a cada rato). Pues en México no quisimos quedarnos atrás y una vez que el presidente chino llegó a tierras aztecas, nos lo llevamos a Campo Marte para apantallar a los visitantes con nuestras fuerzas armadas (por si algún día los chinos piensan invadirnos, vean que de este lado del mundo también hace aire).
Así es en China…
Y así en México…
Bueno, respecto a esta última foto, sucede que durante la ceremonia de bienvenida a la comitiva china, un cadete del Colegio Militar se desmayó debido a un golpe de calor y nos regaló su mejor imitación de Pacquiao. Ninguno de sus compañeros lo ayudo pues como sabemos, el rigor de los soldados hace que guarden la solemnidad y marcialidad en todo momento.
Ya luego se lo llevaron.
Esta no fue la única caída, de hecho en el mismo evento uno de los fotógrafos que cubría este acto también se vino abajo:
¡La bajada es por atrás!
A pesar de esto, el presidente chino se veía muy contento. No obstante, no todo es diversión, por lo que llegó el momento en el que Xi Jinping y Enrique Peña Nieto se sentaron a platicar sobre la relación de ambas naciones. Se esperaba mucho de esta reunión, pues China es una potencia en todos los sentidos y nuestro país podría verse beneficiado de muchas formas.
Tiempo después se anunció con bombo y platillo el resultado de estas negociaciones:
¡¡¡Vamos a exportar más carne de cerdo y tequila a China!!!
Y ya. El anuncio principal después de una reunión con el presidente de una de las naciones más poderosas del mundo fue que les mandaremos chicharrón y chupe. Si bien esto es bueno para la industria de estos productos, se esperaría que hubieran más tratados, intercambios y que se sacara más provecho de esta visita. También se anunció un crédito chino para la empresa Pemex.
Ahora bien, el momento cumbre de esta visita (hasta ahora) fue cuando Peng Liyuan, primera dama china, cumplió uno de sus sueños de toda la vida: conocer Televisa San Ángel.
Es en serio, no estamos bromeando.
Sucede que desde hace tiempo, la esposa del mandatario chino se ha declarado fanática de las telenovelas mexicanas, por lo que aprovechando su estadía en nuestro país, se dio su tiempecito para ir a conocer “la fábrica de sueños” y pisar los mismos foros en donde estuvieron esos personajes que tanto la cautivaron en la pantalla chica.
Su guía en esta aventura no podía ser otra persona que Angélica Rivera, nuestra primera dama que por supuesto, conoce las instalaciones de la televisora como la palma de su mano.
(No sabemos si en algún momento la señora Liyuan le pidió un autógrafo a La Gaviota la señora de Peña Nieto).
Y es que, ¿para qué pasear a nuestros visitantes por nuestras zonas arqueológicas, edificios históricos o monumentos más representativos, si podemos llevarlos a Televisa? En fin, tampoco nos vamos a poner especiales, si a la señora Liyuan le gusta las telenovelas y viajó tan lejos, no íbamos a negarle la posibilidad de ser feliz.
Dicen que Angélica Rivera y Peng Liyuan se cayeron muy bien, y cómo no, si ambas tienen muchas semejanzas: Están casadas con un presidente y le han hecho a eso de la artisteada. De hecho, la primera dama china es cantante de música folclórica china y al parecer no lo hace nada mal. Hasta ganó varios reconocimientos a nivel internacional.
Vean una de las interpretaciones de Peng Liyuan:
Y para no quedarnos atrás, una de nuestra primera dama:
¡Quiubo! Pues aprovechando que ya son amigas, deberían grabar un dueto, les quedaría bien padre.
Para continuar con esto de los artistas, la reunión de las autoridades de México y China fue amenizada por la cantante Lucero, a quien presentaron como “la reina de la canción mexicana” y estuvo acompañada del Mariachi Gama 1000. Aquello hasta parecía Siempre en Domingo.
Lo bueno es que Lucero no llevó a su guardaespaldas.
Y así van las cosas con la visita de Xi Jinping a México. Recuerden, lo que acaban de leer no fue vacilada, realmente pasó. Apenas va un día de la visita, por lo que no descartamos que pasen más cosas bizarras.
¡Viva México, Viva China, y Viva Lucerito “la novia de América”!