El presidente de uno de los países más poderosos en el mundo, Donald Trump, ha negado los efectos del cambio climático, las fábricas continúan emitiendo gases a niveles industriales y cada verano los países europeos registran récords de temperaturas, hasta en los lugares donde era inconcebible, como la zona nórdica. Ante este panorama, expertos de Naciones Unidas han lanzado la alerta: de seguir así, sin ninguna medida drástica, entre 2030 y 2052, la humanidad se enfrentará a una crisis nunca antes vista.
Es decir, las cosas se pondrán feas en el futuro, de no tomar medidas que modulen y frenen la emisión de gases de efecto invernadero, ocasionadas por nuestras actividades —desde las industrias hasta nuestro consumo de energéticos como el petróleo—.
La alerta la lanzó el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés). En su informe, ha quedado claro que el principal objetivo del Acuerdo de París está en riesgo: reducir las emisiones de los gases de efecto invernadero, manteniendo el aumento en 1,5 grados, para limitar el calentamiento antes de que llegue a 2 grados.
Diez centímetros más en el nivel del mar y la extinción de los arrecifes de coral se pueden evitar si se limita el calentamiento global a un 1,5 °C en lugar de 2°C para 2100.
Para esto se necesitarán medidas rápidas y sin precedentes. @ONUMedioAmb ?https://t.co/cREg1oytS7— Noticias ONU (@NoticiasONU) October 8, 2018
“No” al dióxido de carbono
El grupo de científicos explicó que el proceso de debe dar de manera rápida y con un “gran alcance”, en rubros como: electricidad, agricultura, industria y transporte, si no queremos cocernos en nuestro jugo y empeorar al panorama para nuestra generación y las que vienen.
Así que es necesario, de acuerdo con la ONU, que las industrias le bajen a la emisión de dióxido de carbono (CO2) —que es el principal gas de efecto invernadero—en un 45%, con respecto al nivel que se alcanzó en 2010.
Es decir, para 2030 la reducción debe estar al 45%. Y para 2050, la humanidad tiene el reto de haber terminado con estas emisiones, tarea súper complicada ante mentalidades como la de Donald Trump y las grandes empresas que apuestan a las ganancias económicas antes de apostar por la vida en el planeta Tierra.
El escenario
Pese al panorama, los expertos de la ONU dijeron que, por lo pronto, llevamos un poco de ventaja, ya que algunas de las acciones y protocolos necesarios para frenar el calentamiento global, ya se llevan a cabo. El asunto en este caso, es acelerar el proceso.
Se supone que en la reducción de gases de efecto invernadero, los 200 países que firmaron el Acuerdo de París —entre ellos, México— se comprometieron a mantener los niveles por debajo de los 2 grados.
Sin embargo, si esto no sucede, las predicciones en cuanto a la raza humana y las especies NO es nada positiva. Por ejemplo, la seguridad alimentaria, el abastecimiento de agua y, por ende, la seguridad y el crecimiento económico se verían afectados. Pero hay más: se registraría la desaparición de algunas especies, más incendios forestales, la desaparición de los arrecifes de coral en las aguas cálidas.
Finalmente, el IPCC ya puso la alerta y el tema sobre la mesa, algo sumamente difícil, pues entre la ignorancia y el “hambre” de generar mayores ganancias económicas por distintos grupos empresariales —sobre todo los que tienen que ver con el petróleo—, son los principales obstáculos para reducir las emisiones.
Sólo basta recordar que en 2017, Donald Trump anunció la salida de Estados Unidos del Acuerdo de París, pues se quejaba que este “no era nada justo” y afectaba a su país —considerado como uno de los mayores emisores de gases de efecto invernadero, tan sólo después de China—.
Ya valió barriga… Donald Trump anuncia que Estados Unidos abandona el acuerdo de París, aunque dice que lo puede "renegociar" pic.twitter.com/UVWc9spmAM
— Sopitas (@sopitas) June 1, 2017
Pero la alerta ya está hecha y, a menos de que las grandes corporaciones, líderes de Estado y población quiera desaparecer la especie o más bien, todas las especies, es imperante el cambio en las políticas ambientales, porque planeta Tierra sólo hay uno.