Por la noche —del 11 de marzo—, la Secretaría de la Función Pública (SFP) dio a conocer que tres personas fueron vinculadas a proceso por su presunta responsabilidad en la sustracción del expediente de la Casa Blanca en los archivos de esta dependencia. A la par, Animal Político detalló que una de esas personas es el subsecretario de la Contraloría del gobierno de Alfredo Del Mazo, compa del expresidente Enrique Peña Nieto.
De acuerdo con la SFP, la vinculación a proceso de estas personas fue resultado de una denuncia que la propia Secretaría presentó ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción por el robo o la sustracción del expediente que pues, como todos sabemos, está relacionado con un asunto de conflicto de interés entre el expresidente Peña Nieto y Grupo Higa por la compra de la Casa Blanca —una mansión cuyo costo fue de siete millones de dólares y construida por esta compañía que ya tenía un par de negocios con el gobierno de México.
Vinculan a proceso a tres personas denunciadas por la Función Pública por la presunta sustracción del expediente de la «Casa Blanca»
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— SFP México 🇲🇽 (@SFP_mx) March 12, 2021
Vinculan a proceso a funcionario de Alfredo del Mazo por robo de expediente de la Casa Blanca
Animal Político señaló que José Gabriel “N”, quien durante el sexenio de EPN fue subsecretario de la Secretaría de la Función Pública y actualmente es el jefe de la Subsecretaría de Control y Evaluación de la Secretaría de la Contraloría del Estado de México, fue vinculado a proceso por la sustracción del expediente original de la Casa Blanca en la dependencia federal.
La Fiscalía General de la República (FGR) está a cargo del caso —que va de nuez: se desprendió de la denuncia hecha por la SFP a cargo de Irma Eréndira Sandoval porque nomás no sabían dónde había quedado el expediente original de la polémica Casa Blanca— y además del funcionario de Alfredo del Mazo otros dos exfuncionarios federales están relacionados con este asunto por el presunto ejercicio indebido del servicio público en la modalidad de omisión por comisión.
Aquí el asunto es que la SFP detectó que el expediente original de la Casa Blanca fue sustituido por una copia de la versión pública que presuntamente omite varias evidencias de la investigación.
Y todo eso sucedió durante el cambio de poderes, del gobierno de EPN al de AMLO.
“Tras una minuciosa indagatoria, en la que se hizo evidente que el expediente de la llamada Casa Blanca no fue archivado de conformidad con la ley en la materia y las normas internas de esta Secretaría, la Función Pública presentó una denuncia penal ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción por el posible delito de ejercicio ilícito de servicio público por tres personas que ocuparon los cargos de Subsecretario de Responsabilidades Administrativas y Contrataciones Públicas, de Director General de Denuncias e Investigaciones y de Director General Adjunto de Investigaciones, a finales de la anterior administración”.
Pa pronto, las otras personas imputadas ocuparon cargos en la Dirección General de Denuncias e Investigaciones y la Dirección General Adjunto de Investigaciones a finales del sexenio de Enrique Peña Nieto.
Además, uno de los tres imputados saltó al gobierno de Alfredo Del Mazo. Ahora, habrá qué ver cómo avanza la investigación de la sustracción o robo del expediente original de la Casa Blanca en la Función Pública durante aquel cambio de estafeta de gobierno.
La Casa Blanca de EPN
Sólo para tener fresca la memoria, va un breve resumen de la Casa Blanca:
En 2014 el equipo de investigación periodística de Carmen Aristegui se puso a indagar qué sucedía con una mansión que Angélica Rivera, exesposa de EPN, presumió en la revista ¡Hola!
Y lo que encontraron fue un problema de conflicto de interés, donde la casa ubicada en Lomas de Chapultepec —Sierra Gorda 150, valuada en siete millones de dólares— era propiedad de Ingeniería Inmobiliaria del Centro, compañía perteneciente a Grupo Higa, que tenía una filial puesta para participar en la construcción del tren de alta velocidad México-Querétaro.
Peeeeeero resultó que tanto EPN como Angélica Rivera le entraron en el diseño de esta mansión junto con el arquitecto encargado del proyecto.
Al fina, Angélica Rivera salió al tiro y defender la Casa Blanca, argumentando que su compra fue fruto de sus esfuerzos y trayectoria como actriz, en un intento por tapar el conflicto de interés existente.
A pesar de la investigación del equipo de Carmen Aristegui, no pasó mucho con este caso durante el sexenio de EPN.