La experimentada fuerza aérea de los Estados Unidos, bombardeó ayer un hospital ubicado en la ciudad de Kunduz, Afganistán, operado por personal de “Médicos Sin Fronteras” (MSF). El ataque dejó un saldo de 19 personas muertas y 37 lesionadas.
El bombardeo, el cual se mantuvo después de que les fue reportado a las partes en conflicto lo sucedido, fue calificado por el ejército de los Estados Unidos como un “daño colateral“ de las labores que realizan para expulsar a los talibanes islamitas de la localidad.
Las fuerzas talibanes ocuparon Kuduz desde el lunes pasado. Desde entonces los afganos intentan retomar el control de la localidad. En estos intentos, reciben ayuda de la coalición internacional liderada por el Ejército norteamericano y bueno, les falló la puntería en esta ocasión… o no.
Aunque MSF entregó en varias ocasiones las coordenadas de localización de suhospital, esto tanto a las fuerzas talibanas como a las de los Estados Unidos, el bombardeó se prolongó 30 minutos después de haber informado lo sucedido a los jefes militares en Kabul y Washington. Es decir, el ataque norteamericano duró cerca de una hora.
“De las 2:08 AM hasta las 03:15 AM, hora local de hoy, el Centro de Trauma de MSF en Kunduz fue golpeado por una serie de bombardeos aéreos, en incursiones a intervalos de aproximadamente 15 minutos”, señaló Médicos sin Fronteras a través de un comunicado.
Aunque para las fuerzas de los Estados Unidos el ataque es sólo un “daño colateral” de sus operaciones, para la presidenta de MMSF se trata de una aberrante “violación del derecho internacional humanitario”, por lo que exigió una investigación a fin de tener “la total trasparencia de las fuerzas de coalición”.
Por su parte, el secretario de defensa de los Estados Unidos, Ashton Carter, aseguró que ya se realiza una investigación exhaustiva… aunque justificando que la zona en que se ubicaba el hospital es escenario de intensos combates. A la causa justificadora añadió el portavoz del ejército, el coronel Brian Tribus: “el ataque puede haber provocado un daño colateral en un centro médico cercano… Este incidente está bajo investigación”.
Bueno, sí hubo muertos inocentes… pero también se consiguió dar muerte a entre 10 y 15 terroristas que se encontraban escondidos en el hospital al momento del ataque, aseguró el portavoz del Ministerio del Interior de Afganistán, Sediq Sediqqi.
Al respecto, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama ofreció sus condolencias a familiares y deudos de las víctimas del bombardeo. “En nombre del pueblo estadunidense ofrezco mis profundas condolencias por los médicos y otros civiles muertos en el trágico incidente en un hospital de Médicos sin Fronteras en Kunduz”.