Para seguir dándonos atole con el dedo, la Procuraduría General de la República (PGR) invitó al exdirector de Pemex, Emilio Lozoya a echarse un cafecito el próximo jueves, allá en sus instalaciones, donde lo tendrán un buen rato para después salir a decir que “ha cooperado con sus declaraciones y muy pronto habrá resultados de esta importante indagatoria que supone la corrupción de varios funcionarios mexicanos”.
Digo… en oportuna respuesta a las acusaciones de soborno que pesan en contra del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, la PGR llamó a comparecer a éste el próximo jueves a las 11 de la mañana. En esta presentación el exfuncionario de la paraestatal aclarará cómo está eso de que recibió 10 millones de dólares a cambio de beneficios para la empresa brasileña Odebrecht… o al menos se supone, ya que no nomás irá a echar chisme, sino que acudirá en “calidad de imputado”.
El citatorio llegó directamente a las manitas del abogado de Lozoya, Javier Coello Trejo, hombre que hasta hace poco se hacía el sorprendido y aseguraba que no tenía ni la más remota idea de por qué los ejecutivos de Odebrecht embarraban a su cliente en la red de corrupción internacional. Incluso, al apuntar que todo era nomás “mediático”, el abogado llegó a comentar que la PGR no investigaba a Lozoya y nunca lo había requerido.
Pero llegó el día y luego de que el exdirector de Odebrecht en México, Luis Alberto de Meneses Weyll, dijera en delación compensada que Lozoya fue el funcionario mexicano que estiró su manota para recibir sobornos por parte de la constructora, el exfuncionario de la paraestatal tendrá que rendir cuentas.
“Hago de su conocimiento que deberá comparecer en calidad de imputado ante esta representación social, ello en virtud de que se ha mantenido intercambio de información con la República de Brasil, en donde se logró recabar la declaración en las cuales usted ha sido mencionado”, señala el citatorio emitido por la PGR.
Y para que el abogado Coello no siga diciendo que nomás es puro “chou”, la Procuraduría señala que el llamado se hace a partir de las declaraciones que De Meneses y de otros dos ejecutivos de la firma (Marcelo Bahía Odebrecht y Hilberto Mascarenhas Alves da Silva), las cuales se recibieron vía asistencia jurídica internacional y, en breve, serán recibidas en copia certificada. Cabe señalar que aunque Coello ha desestimado estas declaraciones en diversas entrevistas, acusando que, como son delaciones compensadas, los susodichos nomás soltaron nombres a lo güey, éstas han servido para entambar a funcionarios de alto nivel… claro, en otros países.
Porque hay que señalar que aunque el caso de Lozoya sea llevado hasta un juez de control, esto no implicaría la privación de la libertad… y no porque sea cuate del presidente, sino porque en el nuevo sistema penal el cohecho y el lavado de dinero no son delitos graves. Tenía razón Mancera…