Indígenas andino amazónicos que viven aislados por voluntad establecieron contacto por primera vez con pobladores de Brasil.
A finales de junio dos miembros de una tribu andino amazónica (en la frontera entre Brasil y Perú), hicieron contacto con miembros de otra tribu del norte de Brasil, la etnia Asháninka, este primer contacto les provocó gripe debido su falta de anticuerpos.
Al día siguiente aparecieron tres, gritando, gesticulando, tocándose la barriga a la orilla del río Xinane frente a un equipo de la Fundación Nacional del Indio (Funai) brasileña acompañado por indígenas provenientes de la etnia Asháninka.
El primer momento del encuentro fue grabado en video, en el que se aprecia como los indígenas aceptan dos racimos de plátanos con desconfianza. En el segundo encuentro, dos de ellos llegan a otra aldea, se llevan un hacha y un machete, mientras alguien detrás les grita: “¡No, no!”.
¿Por qué decidieron acercarse a otras aldeas?
En realidad no se sabe porque esta grupo étnico decidió romper su aislamiento y establecer contacto con otros pueblos vecinos. Una de las explicaciones es que los indígenas atravesaron la frontera de Perú buscando ayuda contra los taladores de madera clandestinos y narcotraficantes que invadieron sus tierras.
“Según relatos hechos por medio de intérpretes, una de las causas del contacto puede ser la presión de taladores ilegales y narcotraficantes”.
Otra posibilidad puede ser que se acercaron para obtener objetos útiles para su vida cotidiana, como cuchillos u ollas.
“Este es un pueblo en busca de tecnología. Es importante en sus vidas, porque hay una guerra interna entre ellos y por el contacto con grupos no indígenas”,señaló el antropólogo Terri Aquino
Por la ubicación se sabe que estos indígenas son hablantes de alguna de las variantes de la familia de lenguas pano, mientras que a la aldea a la que llegaron viven más de 70 indígenas Ashaninka, que son de la familia lingüística Arawak.