Ni una cumbia, ni un vals ni otro tipo de baile está permitido si es en una plaza pública y las mujeres no llevan su hiyab o velo en Irán. Al menos eso es lo que sabemos ahora que una denuncia internacional pide la libertad para una pareja de influencers que fue detenida y condenada por, ¿bailar en público?
Desde hace un par de días organizaciones civiles denunciaron que la pareja de jóvenes influencers —de poco más de 20 años de edad— había sido detenida y condenada, después de que se viralizara un video donde bailaba frente a la Torre Azadi en una plaza pública de Teherán, en noviembre de 2022.
El caso de una pareja de influencers condenada a prisión por…¿bailar? en Irán
Se trata de Astiaj Haghighi y Amir Mohammad Ahmadi, dos influencers que tienen encima una acusación por supuestamente fomentar la corrupción y prostitución pública y reunirse con intensiones de perturbar la seguridad iraní.
¿Neta? Así las reglas morales y civiles de aquel país, donde organizaciones y civiles vieron en ese baile un momento de libertad y también de protesta, en contexto de las manifestaciones por el caso de Mahsa Amini —la joven que murió bajo custodia de la Policía Moral por no llevar “correctamente” el velo.
Sobre todo porque al bailar, Astiaj Haghighi no portaba el velo y de esta manera desafió el llamado código de vestimenta para las mujeres —además de que tampoco pueden bailar en público y menos con un hombre, según la ley.
En un inicio se habló de una condena de 10 años de prisión para cada uno de los influencers, pero la agencia de noticias del Poder Judicial de Irán Mozan Online salió a decir que la sentencia fue de 5 años por publicar un llamado a las protestas.
Aún así, el llamado de la comunidad internacional es el mismo: libertad para Astiaj Haghighi y Amir Mohammad Ahmadi, en contexto de una ola de detenciones y condenas a raíz de las manifestaciones por el caso de Mahsa Amini —y la exigencia para que el gobierno de Irán cambie su política restrictiva y violenta hacia los derechos de las mujeres.
(En 2019 un caso más o menos por el estilo hizo ruido en todo el mundo, pues la policía de Irán detuvo a una pareja por una propuesta de matrimonio, en un centro comercial en Arak, en Teherán. Aquella vez la pareja pudo salir bajo fianza, sin embargo, este caso mostró el nivel restrictivo de la aplicación de las leyes morales y civiles de aquel país).