Ese momento en que llegas al cine, con tu caja de palomitas jumbo y te sientas a ver una función de Pixar que sabes que estará buena, como todas sus películas. Comienza la proyección y solo han pasado dos minutos y tú ya estas llorando como recién nacido, eso fue lo que logró Up con una de las historias de amor más bonitas.
Lo increíble de esta película no fue solo eso, también la historia, los personajes como el Sr. Fredricksen, Russell, el perro que hablaba Dug y la casa son globos que nos hizo desear tener una así.
Tal vez creíamos que esta casa nació de la imaginación de los escritores, sin embargo, la vivienda fue inspirada en una que se encuentra en la ciudad de Seattle, la casa de Up! es real. Cuenta con 92 metros cuadrados y su dueña, Edith Macefield, murió en 2008, dejándola de herencia a un superintendente de construcción con quien tenía amistad.
La amenaza de ser demolida es la más latente, para extender las construcciones aledañas a ella. Por suerte la organización Land Trust OPAL (organización que se dedica a restaurar viviendas para la comunidad de Orcas Island) declaró que quiere mover la casa a un canal de navegación, para así restaurarla y, que la casa de casi 100 años que ahora es un ícono, pueda servir de vivienda para alguien en Orcas Island.
El costo es de 200 mil dólares y se espera que se recaude esta cantidad de dinero antes del 15 de septiembre, que cubrirá los gastos de mudanza y restauración. Así que si quieren hacer su buena acción del día, pueden donar aquí.