Tras una jornada en la que se dieron enfrentamientos entre policías y manifestantes, además de presentarse el despido de 42 funcionarios, la huelga en el Metro de São Paulo terminó… momentáneamente, ya que el Sindicato amenaza con regresar el 12 de junio, justo cuando se realice la inauguración de la Copa del Mundo.
Ayer los operadores tuvieron tiempo para terminar correctamente la jornada laboral: “ya pedí a los compañeros que regresen al trabajo (…) el ramo entendió que era hora de regresar al trabajo para mostrar la disposición de negociar. Espero que el gobierno negocie”, señaló Altino Prazeres Junior, presidente del Sindicato del Metro.
Aunque no hay todavía un acuerdo respecto a las peticiones de un reajuste salarial, el paro se levantó debido a que “la prioridad son los compañeros despedidos”, afirmó Prazeres. Todavía ayer por la tarde, representantes del Sindicato se reunieron con el gobierno estatal para solicitar la anulación de los despidos, sin embargo, su petición fue negada.
En la mañana de este lunes, se pensó que el número de despidos fue mayor, esto porque fueron varios los detenidos por los disturbios presentados en las afueras de la estación Ana Rosa, después se confirmó que de los 19 detenidos, sólo 12 eran operadores del Metro. El gobierno indicó que todos los funcionarios detenidos serán despedidos, sumados a otros más que ya se habían anunciado. Las bajas son en función de lo estipulado en el artículo 482 de la Consolidación de las Leyes del Trabajo, el cual estipula como causas de despido el abandono de trabajo, actos de indisciplina, malos procedimientos, entre otras.
Según Geraldo Alckmin, gobernador de São Paulo, los despidos no pueden ser anulados sólo por el levantamiento de la huelga, ya que fueron realizados en “razón de otro actos”: “el gobierno no hará más despidos con aquellos que regresen al trabajo (…) tienen que ser retirados, por justa causa. Los despidos no fueron sólo en razón de la huelga, fueron en razón de otros actos”.
Sin explicar cuáles son esas “otras razones”, según gente de Alckmin, las bajas fueron a cuenta del historial de vandalismo e violencia de esos funcionarios. En cuanto al reajuste salarial, el gobernador señaló que “no hay más que discutir. Ya hubo discusión y un reajuste por encima de la inflación. Con ganancia real de 3.5% encima de la inflación”, destacó.
Efectivamente, el domingo, el Tribunal Regional de Transporte determinó que la huelga del Metro estaba fuera de lo legal, además de ofrecer un reajuste salarial del 8.7%, mientras que los operadores solicitaban que fuera del 12.2%. Será el mañana por la tarde cuando el Sindicato decida si la huelga regresa; la principal petición ahora es la reinserción de sus compañeros despedidos.